miércoles, 16 de enero de 2013

UNA DE MÓVILES.-



 ·        Tengo un móvil muy lindo y bonito que me han regalado mis hijos.
·        ¡Mira qué ricos!
·        Voy por la calle feliz y contenta, y siempre lo llevo a cuesta.
·        ¡No me digas! Y ¿lo entiendes?
·        ¡Vaya que lo entiendo Mercedes!
·        Pues yo no lo quiero por que dicen que da cáncer.
·        ¡Anda y que se callen!
·        ¡Explícamelo Mari Carmen!
·        Es fácil y sencillo, ¡escúchame bien!
·        Soy toda oídos, u orejas, que para eso la tiene una puesta.
·        ¡Calla y no me entretengas!
·        ¡Pues empieza!
·        Lo que más me molesta es que en mitad del camino se oye un sonido muy fino, tantará,  tarán, tarantán.
·        ¡Me cachis en la mar!
·        ¿Te quieres callar y no interrumpirme más?
·        Está bien, me callaré, pero ibas por tarantán.
·        ¡Ya lo sé! Tantán, tantán, pero, ¡no lo puedo encontrar!
·        ¿Qué haces entonces, Mari Carmen?
·        ¡Pues que me paro en la calle! Entro en un portal, vuelco el bolso y La Pantera Rosa no para de sonar, ¡la voy a machacar! El peine, el monedero, las fotos de mis niños, la barra de labios, ¡al fin lo he cogido!
·        ¡Vaya usted a saber!
·        Hijo, es una llamada de mi hijo
·        ¡Qué móvil más lindo y fino!
·        ¿Si? ¿Diga? ¿Si?
·        ¡Mamaaá, mamaaá, mamaaaaaá!
·        ¡Si, te oigo, no grites maaaaás!
·        ¡Que compres cerveza para papaaá, que la que había ya no estaaá!
·        ¡Me cachis en la mar!

No hay comentarios:

Publicar un comentario