martes, 8 de septiembre de 2020

POR LOS MARES DE CONTRABANDO.- (MICRORRELATO)

 Dicen las malas lenguas que donde hubo fuego, siempre quedan rescoldos, y verdad debe ser cuando…Me excitas nada más verte, y cuando te acercas a mi cuerpo me dan ganas de besarte la boca, que ansiosa está de comerme los labios y otras cosas…Hay una chispa encendida en tus ojos que juguetea con los míos con descaro y picardía, y a mí que me gusta coquetear contigo, la avivo con la llama de mis risas, y tú que estás poseído de tu hombría…Me preguntas con las manos si me gustan las caricias de contrabando…pues…En cuanto me ves, te lanzas a mi cuello con los dientes de un vampiro, y absorbiéndome los sentidos, te bebes la esencia de los delirios…Despacio amigo…que me late el corazón a golpes de tambor cuando te arrimas de sopetón, que escuchando los acordes de tus suspiros se me olvida hasta que existo, y por eso…Una larga mañana me quemé con la aldaba de tu querer esperándote en la puerta de mi casa, hasta que me di cuenta de que era esclava de tu llama, y cuando pasaron varios días sin verte se me arremolinaron las serpientes desde el estómago hasta las sienes, y…Llorando como estaba, me encontré en el laberinto de los espejos de la infancia, donde me perdí entre los reflejos de mi estampa, que por más vueltas que daba, la salida no hallaba pensando que no era yo la que caminaba, si no puro espejismo de una niña asustada…pues…Estaba aferrada a él como una barca encallada en la orilla…Me dolían hasta los suspiros que me salían del pecho como puñales clavados en el cuello…Estaba obsesionada, era como si me hubieran robado la libertad, hasta que…Liberada me siento de las cadenas que me ataban a las caricias de sus manos a mi cuerpo regalado…liberada me encuentro de las emociones y sentimientos que se agolpaban en mi pecho con la esclavitud del recuerdo de sus besos…Besos ardientes y apasionados que me llevaban por el valle de la amargura, y ahora, tranquila y en paz conmigo misma, camino por la vida sabiendo que si lo veo, ya no seré la esclava de sus besos, pero…Los rescoldos que quedaron se reavivaron cuando me mira de soslayo y me pregunta con la vista si te quiero o ya te he olvidado…pues…Me gusta cuando anda ligero para alcanzarme…me gusta cuando se para frente a mí para interrogarme con la vista, pero lo que más me gusta es la esencia de su aroma…ese olor que me hace estremecer de deseo, y me recorren unos cosquilleos por el estómago que me hierve la sangre por dentro, y me entran unas ganas de comérmelo a besos…pues…Todavía lo quiero, y lo que es peor aún…lo amo…Necesito tenerlo en mis brazos de nuevo…hace tanto tiempo desde la última vez…Quizás mañana…demasiadas noches en vela haciéndome la misma pregunta…¿Seguirá queriéndome? ¿Se habrá acostumbrado a pasar de mí? Más bien eres tú la que pasas de mí… ¿Quién habla? ¿Quién hay ahí? ¡Ah, eres tú! Siempre está ahí…no lo puede remediar…bueno, no importa, no me molesta para nada, y si soy sincera…Me agrada saber que todavía sigue ahí, y por eso…Segura y tranquila me siento cada día de mi vida, y aunque no esté conmigo, sigo caminando con las alas de mis letras desnudas y abiertas…pues…No somos pareja, tampoco vivimos juntos, sólo somos amigos con derecho a roce, pero…Tenemos que guardar las distancias para seguir navegando por los mares de contrabando…

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