sábado, 29 de septiembre de 2018

CON LA FURIA DE UN VOLCÁN.- (MICRORRELATO)


Sé que me engañas, que me mientes, que te gusta 

otra, que la buscas como me buscabas antes a 

mí…que vas por donde ella suele pasar para 

verla, que la sigues, que la miras fijamente como 

sueles hacer para llamar su atención…Es tu estilo, 

tu forma de atraer a las mujeres para que caigan 

rendidas a tus pies…pues… Necesitas estar 

constantemente enamorado, excitado, 

incandescente, en continua evolución para sentirte 

vivo…Tu cuerpo te pide marcha, lo sé, siempre lo 

he sabido, ¡vaya que sí! Lo que pasa es que te 

quiero tanto que me hago la tonta para no 

perderte, porque perderte a ti sería perderme yo 

por los arrabales de la ciudad y no quisiera, 

¿sabes? Vaya a ser que me convierta en una de 

esas nómadas que van por las calles pidiendo 

guerra por venganza o por la ira que me 

consuman en las entrañas…y no me gustaría caer 

tan bajo…Ya lo decía mi madre que en paz 

descanse…Hija mía, una mujer ante todo tiene 

que demostrar ser una gran señora y nunca ir 

detrás de un hombre…Entonces, cuando era más 

jovencita así lo creía, y lo llevaba a rajatabla tan 

sólo porque me educaron a la antigua usanza, 

haciéndome creer que actuando de esa manera 

tendría más dignidad, ¡qué error más grande por 

Dios! Siempre escondiendo mis lágrimas, 

acallando el llanto contenido para que no se 

escucharan los gemidos…Disimulando el dolor y 

la pena tras la máscara de la altivez y orgullo 

absurdo, reprimiendo mis sentimientos por temor 

a que se rieran de mí…¡qué tonta! Como si 

hacerse la fuerte y valiente sólo lo pudieran hacer 

las divas del teatro…o como aquella famosa frase 

incrustada en todas las niñas al nacer…Una mujer 

se tiene que dar a valer…¿qué pasa? Que si una 

llora y demuestra todo el amor que siente por un 

hombre, que lo ama y lo grita a los cuatro vientos 

ya no vale nada y deja de ser una mujer de la 

cabeza a los pies…Me importa un bledo lo que 

piensen los demás porque yo soy lo que siento…y 
siento que sin ti muero…pues…Te quiero, te 


deseo y te necesito para seguir viviendo…

aunque…A veces me abruman los malos 

pensamientos…Quizás esté equivocada y todo 

sean alucinaciones mías, pero…Algo en mi 

interior no para de martillearme en la cabeza que 

tú estás con otra, y el corazón me lacera en los 

sentimientos las cosas que tú no me dices y que él 

me cuenta de ti…Me dice que todas las mañanas 

vas donde ella vive, que le has pillado la hora de 

salida y entrada a su casa, que te la quedas 

observando, y que cuando va caminando te pegas 

muy cerquita de su cuerpo para oler su perfume, 

que lo aspiras y se te llena el cuerpo de deseo, 

¡madre mía de mi vida! Sólo el pensarlo me dan 

ganas de gritarte en medio de la calle la rabia que 

me entra por el cuerpo, que se me llena el alma de 

puro veneno y un odio que me sale de los ojos 

que si fueran puñales se te clavaban en las 

espaldas…pues…Así empezaste conmigo, 

pero…¿sabes que te digo? ¿Qué…? Que si tanto 

la deseas ahí la tienes, toda entera para ti que yo 

seguiré mi camino tranquila y sin derramar una 

lágrima más, porque de tanto como lloré me 

quedé vacía…Vacía y sola me encuentro imbuida 

en un mar de dudas, sin saber si me sigues 

queriendo o no, porque últimamente siento que 

tan sólo me utilizas y no me amas, y por eso…Me 

voy por donde no me puedas ver, ni encontrar, 

haciéndome la fuerte y la valiente, 

escondiéndome tras una mascarada de pasión, 

coqueteando con unos y otros para llamar tu 

atención, y cuando te cruzas en mi camino te 

sonrío con toda mi boca para que pienses que no 

me importas, que me das igual y que ya no me 

duele tu olvido…¡fíjate qué contradicción! No, si 

al final le voy a tener que dar la razón a lo que 

decía mi madre, ¡qué lista era...!Y es que las 

madres de antes tenían una sabiduría pertinaz, o 

es ese sexto sentido que tenemos todas las 

mujeres antes de nacer... pues… He descubierto 

que con éste cambio de actitud, te tengo aferradito 

a mi querer, porque…No soy mujer a la que se la 

pueda dejar de lado, ignorándola como si fuera 

una más del avatar, si no que…Necesito sentir en 

mis carnes las chispas de fuego que despiertan tu 

mirar cuando me ves…pero cuando no me ves…

que estallen en el aire con la furia de un volcán…





domingo, 23 de septiembre de 2018

COMO SI FUERA UNA NANA DE BESOS.- (MICRORRELATO)


El corazón me dio un pálpito, no me lo esperaba…Hacía varias semanas que no coincidíamos…Me quedé observando sus pasos para ver si me había visto, y sí… Me había visto antes de cruzar la carretera, y como siempre solía hacer, se encaminó hacia mí para hacerse notar…Sonreí para mis adentros pensando…lo tengo en el bote…Un leve suspiro cruzó mi pecho poniéndome nerviosa, apenas daba pie con bolo andando del temblor que me entraba en las piernas, casi me tropiezo…tierra trágame…pues…A pesar de los años que han pasado...Aún siento en mi interior esa punzada en el corazón, la misma de cuando salía del instituto, y allí que estaba el chico más guapo de la pandilla, donde entre todas las chicas de cuarto curso de bachiller, se había fijado en mí, y nada más verlo el corazón me daba un brinco tan fuerte que parecía que me iba a explotar…Deben ser esas alitas de mariposas que se quedaron presas revoloteando en el pecho…Me quedé observándolo de arriba abajo con una desvergüenza y un descaro que, por entonces, en la época estudiantil no hubiera sido capaz ni en sueños de lo timorata que era, pero ahora, a éstas alturas de la vida, el desparpajo literario hizo mella en mi elocuente lengua y sin pensármelo un segundo le solté a bocajarro…¡Oye! ¿Qué? ¿Sabes que te digo...? Se quedó mirándome sorprendido...y al ver que estaba comiéndomelo con la mirada y en plan guerrera, me volvió a decir...No, se a que te refieres... Veras... es que... Me gustas mucho...me encantas...me vuelves loca...y cada vez que te veo...se me llena el cuerpo de deseo...y no sé por qué... peroDejé caer en el aire ese lapsus de sentimientos, que sin darse cuenta él, atrapé de la expresión de su boca y que me estaba traspasando con sus pensamientos…Sé que me necesitas, que me piensas, que estás ahí...tras de mi...agarrado a mi cintura, aspirándome el aroma de los deseos, oyendo los latidos de mis emociones cuando te arrimas a mis espaldas...pues... Hoy te dejé hacer... Dejé que manejaras mis ansias, mis pasiones y mis deseos...y yo grité para que sintieras en tu vida los placeres de mi cuerpo y supieras como te amo y de qué manera te pertenezco... Te pertenezco cuando quiero y me lo piden las debilidades que me atormentan cuando no te veo…pero… Cuando te veo, ¡ay madre mía de mi vida cuando te veo…! Salgo corriendo por las esquinas y le doy vueltas a las calles tan sólo para decirte muy bajito…Desfallezco de amor por ti… Lo sabes, ¿verdad? Sabes de las flaquezas que me arrastran a decir todo lo que sale de mis adentros como puro veneno...pues…Tengo tus manos grapadas en mi cintura… clavadas en el alma a golpes de suspiros y amores secretos, y por eso… No paro de quererte ni un momento, sin normas ni acatamiento, ¿te enteras? Que te quiero porque te quiero y no hay más qué decir, ni dar marcha atrás a éste querer infinito y procaz…pero… ¿Sabes que te digo? Se quedó expectante, como siempre…pues…Eres uno de esos hombres que hasta que no ve la cosa hecha, atada y segura no se arriesgan ni se mojan, si no que esperan pacientemente a ver por dónde sale una para atacar, y esa una soy yo, la presa…tu presa… La que provoca cada situación para sacarte a barrer, ¡vaya qué sí! Que te lanzas a la caza y captura sabiéndome tuya de por vida y sin objeción, y por eso… A veces me dan ganas de salir en busca de alguien para que me haga olvidar esta debilidad que siento por ti…o…Quizás sólo quiera hacerme la ilusión de que todavía estés loco por mis besos, y te haga rabiar un poco para que no tengas tanta seguridad y poder sobre mípues… De vez en cuando te alejas despareciendo de mi vista, y tengo la sensación de que ya no sientes deseos de estar conmigo haciéndome dudar de tu verdadero amor, pero…Cuando me acuesto me deleito recordando las caricias de tus manos alrededor de mi cuello… de cómo me despeinas y te quedas observando cada detalle de mi rostro mirándome a los ojos…de cómo te paras en cada uno de ellos para leer mis sentimientos…te acercas y me lo cierras con tus labios…y por la expresión de tu mirada siento cuánto me amas a pesar de las dudas de mi alma…después me besas la nariz y me dices…mirada picarona…Y me duermo mecida con los gemidos de tu garganta como si fuera una nana de besos acariciándome por las espaldas…

lunes, 17 de septiembre de 2018

ESE INSACIABLE APETITO CARNAL.- (MICRORRELATO)


Estás ahí, lo sé, no te escondas, ya sabes que te siento y te veo…Venga, sal ya de tu escondite, mira que al final no aguantas y te rindes...Mil caras, mil caras tenía regalada dentro de su ser cuando lo conocí a usted, pero que yo no las quería, ¿te enteras? pero con ellas me encontré, ¡vaya que sí! Que están invadiendo mi espacio emocional con hambre y con sed, pero…Escucha…¿Quién yo? Sí, sí tú…No pienses que estoy hablando con ese o aquél…No, no…para nada, que sabes bien que me refiero a ti, así que no te hagas el tonto ni disimules tanto, que para actuar ya estáis bastantes tipos invadiendo éste espacio de la red donde abundan tal cantidad de solicitudes de infieles, que entre risas y lágrimas se aceptan por entretener las largas tardes de septiembre…pues…Dicen las malas lenguas que es en ésta época cuando más depresiones atacan las soledades en edades otoñales, y chateando se espantan todos los males, sobre todo personas que viven solas, pero hay algunos tipos que, con argucias y buen trato, se valen de éste medio para seducir a jóvenes inocentes o a mujeres desencantadas de sus maridos, que pasado de los cincuentas, las ignoran para buscar carnes fresca por otro lado, como si sus esposas ya no tuvieran sentimientos y deseos de amar y ser amadas…pues…Estando metida en mis quehaceres cotidianos, me encuentro a uno de esos tíos cachas, guaperas, todo atlético de los pies a la cabeza, típico buitre cuarentón…Sí, sí…esos que están siempre oteando desde lo alto a la presa fácil y se lanzan en picado a por ella…En un mensaje privado me dice con mucha sutileza que le habían encantado unos versos míos, ponderándolos de geniales y sensuales como si fuera una obra de arte, y a lo bajini saca su hacha de guerra adulándome, ¡vamos que estaba tanteando el terreno para seducirme…! Hasta se atrevió a preguntarme la edad, para seguidamente soltarme a lo bestia si me gustan los hombres más jóvenes…¡Jolines! ¿Es así cómo se liga ahora? Claro que una está de vuelta de toda esa parafernalia barata y paso palabra…pues…Éstos hombres que van por la vida muy gallitos, en el momento que dan con una mujer rebelde, que se ha hecho a sí misma, defensora empedernida de las causas perdidas y que ha pasado por tantas calamidades, la verdad y sin ánimo de presumir, es que me los zampo con patatas fritas…pero a lo que iba…Que sepas que ya no te deseo tanto como antes, ¿te enteras? Debe ser esta edad tan dúctil que tengo, que todo lo suaviza y me lleva a pensar que lo mejor siempre estará por llegar…pues…Le estoy dando vida y aliento a la idea de dejarme encontrar, porque sí tú cuando me ves te vas hacia otro lugar…yo haré lo mismo para que me vea ese o aquél…y...¿Sabes qué te digo? ¿Qué, qué…? ¡Hala! Ya le salió la osadía patriarcal como si una no hubiera tenido nunca padre…que lo tuve, ¡vaya que lo tuve! Que por cierto, era muy intransigente, bastante dictador y machista hasta la saciedad, que nos tenía a las tres chicas reprimidas y nada de hacer manitas, en cambios a los chicos, alas y a volar…pues…A las mujeres de mi generación nos educaron a llegar vírgenes al matrimonio, y una no se comía una rosca antes del altar, ¡vamos! Como si las ranas que habitan entre cañaverales tan sólo sirviera para sentarse en las rocas y ponerse a croar…Y es que me tienes aburrida tío…¿Ahora me llamas tío? Sí, ¿pasa algo? No, pero como ayer me decías muy acaramelada…Eres el único hombre de mi vida…¿Y? Le contesté plantándole cara…Se quedó callado sin decir nada…¡Míralo! Ya lo he dejado caos…¡A mí, a mí me la va a dar…! ¡Venga hombre ya con tantas pamplinas y escusas baratas! ¡Que no me la das y punto! Que te has dado la vuelta cuando me has visto pasar para no estar conmigo…pero…¿Tú qué te has creído que soy yo? Una muda de quita y pon…pues…Así es como me has tratado, como una camiseta o un pantalón, como si no tuviera corazón…Y lo tengo, ¿te enteras? Que soy muy sensible aunque parezca lo contrario…Se quedó sin habla, más callado que en misa…Lo que ocurre es que estás acostumbrado a verme siempre fuerte y valiente…y lo soy, ¡claro que lo soy! Pero porque yo misma me planto cara ante el espejo y me doy fuerzas para seguir adelante, porque si no, ya me habría derrumbado con tus desquites, tus desprecios y salir corriendo cuando te hartas de mis besos, porque bien que te hinchaste el otro día, ¿te enteras? Que estuviste buscándome como un loco hasta que me encontraste, ¿te acuerdas…o ya lo has olvidado? ¡Una semana entera siguiéndome el rastro hasta que me encontraste! Y muy sutilmente me arrastraste detrás de aquella pared para comerte mi boca…y mi piel…y claro, una es tan débil, porque…No sé qué es lo que tienes que me debilita tanto y a la primera de cambio me derrites como si fuera un helado expuesto al sol…debe ser que estoy enamorada hasta las trancas de ti, porque es verte y volverme loca de pasión…pues…Me encantas, ¿sabes? Me gustas un montón, y mira que hago por olvidarte en los brazos de otros hombres, pero se ve que no, que no me sacas de la cabeza…ni de mis pensamientos, que estás ahí todo clavado como un puñal incandescente en medio del pecho lacerándome las ansias de sexo, porque realmente es puro sexo lo que a ti y a mí nos mantienen vivos, que somos como esos perros callejeros que andan buscando carne fresca para saciar ese insaciable apetito carnal…





miércoles, 12 de septiembre de 2018

Y DEL VAIVÉN EXTRASENSORIAL.- (MICRORRELATO)



Llegaste a mi vida sin esperarlo por una solicitud de amistad que ansiosa acepté…Estábamos necesitados de besos y abrazos cuando nos cruzamos en éstas redes sociales tan poderosas, que viviendo separados empezamos a chatear… Y te siento en mis amaneceres…pues…Cada vez que te veo por aquí se me encienden los pensamientos…y el cuerpo, ¡vaya que sí! Que se me nubla la vista con imágenes pornográficas y las escenifico al instante hablando sola, ¿te enteras? Y la lengua se me desata con frases insinuantes que dejo caer sobre el teclado para que lleguen a tus oídos...y a tu sien...Y tú que estás siempre compuesto y dispuesto a no perder ocasión alguna, la llevas a cabo in situ y al momento arrastrándome hacia los arrabales, y me acaricias el cuerpo sin dejar un pedacito de carne sin rastro de tu sed... y es que…Me conoces, ¡vaya que sí! Que percibes mi estado de ánimo en la forma de dar los pasos cuando voy caminando, intuyendo las dudas que empañan la telaraña que ensombrecen mis pestañas, ¡fíjate si me conoces bien! Hasta los suspiros que me salen del pecho lo sientes pululando por tu piel…Pero…escucha…que yo también te conozco, ¿sabes? Que tengo miedo de los pensamientos tan atrevidos y deshonestos que me sonsacas cuando me ves…pues…Merodean por las teclas antes de imaginarlos en la lectura de los presagios, esos que atrapas como si fueras tú el que los vaya reclamando…y es que…Te has convertido en la sombra de mis latidos, mis exigencias y mis devaneos…hasta de los dimes y diretes que me afectan los malos designios de tus locuras y las mías…pues... Estamos hechos de la misma pasta amor odio de los indómitos mortales, siendo simples y normales como cualquier persona de una sociedad intransigente, enmascarando los sentimientos tras los muros de la realidad, que no conformes con el ritmo natural de las relaciones sexuales, tantean sigilosos por los infiernos consumidos y devorados por las tempestades del alma…y por eso somos…Presa fácil para las emociones furtivas que se fugan tras los cambios hormonales, cuando la juventud y la edad madura se enfrentan en una batalla infinita de deslices platónicos…o…pasionales…pues…Dicen las malas lenguas que la locura no tiene cura, y verdad debe ser cuando... No hay nada más apasionante que subsistir a las terribles hordas de la apatía sexual sintiendo brotar en el espíritu esa semilla inmortal… Y estando en estas tesituras, me veo sentada en horcajadas sobre sus rodillas, chocando mi pecho con su panza brava…y él observando los gestos de mi cara estupefacta, me sonríe diciendo... Orgulloso estoy de ella...Y riéndome de su guasa, le muerdo el cuello y al momento me siento envuelta en una fogata de llamas que desprendía el rastro de sus manos por cada vértebra de mis espaldas, que…Entregada como estaba al laberinto de sus entrañas, le susurro muy bajito todo aquello que tanto me gustaba…y él…Solícito y obediente se deja mecer por la osadía verbal de mis palabras, que con…Sibilina y suspicaz plegaria se iba enroscando por los pliegues de su oreja, arrancándole suspiros que su garganta estrangulaba con la saña de mi avidez… ¡Ay Señor, Señor…! ¿Por qué me hiciste tan terriblemente carnal? ¿No ves que ya no le pega a las canas ni a las marcas de la edad? Pero es que… Estás como para perder el sentido y cometer mil locuras cuando te veo balancearte entre mis piernas…pues…Eres el lazarillo que guía las emociones de mi desequilibrio sentimental, perdiéndome en los gemidos que salen de mi alma con tal que te dedicas a merodear por el monte del oscuro canal… Debe ser que eres experto en el arte del buen amante que paciente espera, o quizás…Sea yo la que sigilosamente te vaya indicando el camino a seguir tras las teclas del sentir, hasta que me derrites con leves gemidos mordiéndome la garganta a través del cristal…Y tú, alerta a cada sonido del eco de tanto espionaje que hay por éstos antros…Tapas mi boca acallando los gritos que me arrancas del pecho cuando te abalanzas a todo gas sobre ellas abriéndose de par en par…y…Esa danza del vientre que bailotea contigo haciéndote remar para adelante y atrás como barquero perdido en alta mar, se embravecen en aguas arremolinadas cuando me escribes…Juguemos amor mío a los médicos y prepárate que te voy a auscultar…y… Como niños traviesos nos liamos a investigar por aquí y por allá hasta que desnudos de palabras y sin ropa nos quedamos al aire libre de carnes…y de pensamientos que atraviesan la mente cuando se está navegando a contracorriente, entregados a la lujuria que ata y desata la aventura de la locura pasional, que antojadiza y caprichosa, nos empuja a caer en ese abismo infinito de pasión, donde tan sólo estamos tú y yo dejándonos mecer por la fuerza de la corriente…y del vaivén extrasensorial…