ÁMAME COMO YO A TI.- (MICRORRELATO)

 Tengamos un momento de locura y desenfreno…me dijo, y ahí se desencadenó todo… Estoy perdiendo la compostura con un amigo...no lo puedo evitar…Es muy zalamero conmigo y con todas mis compañeras de trabajo…No es culpa suya, si no mía por seguirle el juego, y lo peor de todo es que me estoy enamorando de él…El dice que no es ningún juego...pero…Yo sé que si lo es…A mí me violaron hace años, y desde entonces no soporto que me toquen...ni he estado con nadie…Necesito volver a sentir, amar...desear…Él lo sabe...se lo conté porque me pilló con las defensas bajas, a flor de piel, no sé porqué…me estaba desahogando, sacar toda esa rabia de mí que poquito a poco me estaba intoxicando…era como si tuviera un demonio dentro devorándome las entrañas…y los sentimientos, y por eso… Creo que está usando ese veneno que tengo para sacármelo a fuerza de besos…pues...Me hizo volver a sentir mujer…La mujer que asustada y perdida como una niña se escondió tras un caparazón de hierro, y a punto estuvo de oxidarse con la sequedad que emanaba en su interior, y ahora... Sólo quiero tener las caricias de tus manos alrededor de mi cuerpo…y mar adentro…Tengo los ojos rojos, tristes…ausente la mirada tras los visillos de la ventana…Apenas podía asomarme pensando que me espiaba el diablo de las mil caras y las fauces dentelladas, las que se clavaron en mis carnes dejándolas ensangrentadas... malheridas...rotas…Ya no quiero hombres rodeando mis hombros que están desorientados, ni tampoco quiero que me miren por la calle cuando voy caminando…Me santiguo tres veces seguidas mirando al cielo antes de poner los pies en el suelo...observo los rostros de la gente que se cruzan en mi camino y agacho la cabeza para que no reconozcan las marcas de mi abanico…un abanico que siempre llevo conmigo para tapar los desperdicios que me arrojaste cuando me violaste sin mi permiso…Tengo miedo de oír pasos tras de mí…y cierro los ojos apretando mis manos en un puño cerrado junto al corazón…mi corazón…el que tengo roto y ensangrentado cuando destrozaron la llave de mi candado…¿Quién tiene la llave para que sienta sus latidos el aire? Una cortina de humo embistió mi mente al interior conviviendo con el fantasma del miedo, ese de tentáculos afilados que me dejó sumida entre tinieblas hasta que llegaste tú con tu disco de vinilo, y te pusiste a bailar un rock and roll sonriendo y gritando…Tengamos un momento de locura y desenfreno…La luz se hizo en mi alma cuando oí tu voz alegrando los latidos del corazón…Y desde entonces me chispean ardiendo como puro fuego al oírte cantar a través del chat, donde una noche me rescataste de mi propio volcán…Permanecía apagado de tanto mal como me hicieron, y ahora…Me muero de ganas de ti…Ven a mis brazos y enséñame de nuevo a amar…pues...Se me olvidaron los susurros de aliento para seguir con éste juego tan divertido y pasional, y ya no sé cómo empezar…Dime qué camino seguir para que no parezca demasiado atrevida ni tampoco tímida, pero sí que me gustaría que fuera algo sensual…Mira que temo hacer el ridículo y ya no sé ni cómo besar... ¿Dónde estarán aquellos besos tan hermosos? Se quedaron tirados en el barrio de los desamparados y olvidaron regresar a mis labios…Me mordieron los pechos, me ultrajaron lo más preciado que tenía…me robaron la dignidad…mi intimidad quedó expuesta a la merced del sarcasmo como si fuera una muñeca de trapo…Vapulearon mis piernas a la intemperie… No te conozco, no sé quién eres, pero…Una nueva mujer salió al exterior, la que agonizó tras aquél callejón oscuro…Pasaron varios días sin aparecer por esos lugares donde el trasiego de gente me hizo temer encontrarme con él…Semanas y meses escondida tras la pared de mi habitación pensando si fui culpable yo o  él…Quizás lo provoqué con la feminidad de mi ser…no sé qué pensar… Han pasado varios años y esa mujer asustada que se escondió, quedó prendida en lo más profundo de mi ser hasta ahora…Hasta que te conocí y no quisiera quedarme dormida sin fin…No hago más que pensar en ti, en tus palabras de aliento y en tu boca llena de deseo que desde ese primer beso desaparecieron todos mis miedos, y lo único que quiero es que vengas a luchar contra ellos con tu sable de acero, me amarres a tu cuello y atravesemos juntos los senderos del infierno…Mira que no quiero volver al pasado ahora que tengo el pecho tatuado con las caricias de tus manos…Ahora que se alejaron los días amargos metida dentro de mi armario…Ahora que me has enamorado las caderas, las piernas y el vaivén que se forma cuando te meces entre ellas…Ven rápido a mi lado que mis brazos te están reclamando, los tengo ardiendo de tanto como te deseo…Apágalo con tu ávida lengua y dime que me deseas como nunca has deseado a mujer…Dime palabras bonitas, haz que desaparezca la timidez de mi cuerpo y llévame atada a tus alas de fuego…Abrázame por la cintura y elévame a las alturas de los rascacielos para que salgan los suspiros reprimidos tras los muros de los témpanos de hielo…Arráncame los gemidos con tu boca de vampiro mordiéndome el cuello hasta que retumben los placeres de mi cuerpo…y me hagas sentir mujer de nuevo…Ven hacia mí y apaga las llamas de mi cuerpo antes que arda en mi propio infierno y ámame como yo a ti…