Estaba pasando por los
peores momentos de mi vida, cuando se cruzó en mi camino sin buscarlo ni
pensarlo…Hacía cuatro años desde que me separé…Había perdido la fe en todos los
hombres, tantos desengaños, tantas aventuras sin salida…No sabía ni qué hacer con
mi vida…De vez en cuando quedaba con las amigas para salir a tomar unas
cervezas o ir al cine, incluso más de una vez nos íbamos un fin de semana por
algún lugar de España…Fue entonces cuando lo conocí…Estaba divorciado…Empezamos
a quedar, y antes de darme cuenta ya lo tenía enredado entre mis sábanas…y mis
piernas…Éramos dos almas gemelas siempre dispuestas a dar todo lo que
llevábamos dentro…Fuego, puro fuego que nos quemaban las entrañas…y nuestros
sueños…No estaba dispuesto a perder la libertad de su techo…Yo no quería
atraparlo sin su consentimiento…Eres el mayor tormento aferrado a mi pecho, que
hace y deshace mis pensamientos como si fueras el dueño de ellos, y yo prendida
como me encuentro a los caprichos de tus sentimientos, caigo rendida y abatida
en la cal viva de tu cuerpo que agoniza fluyendo lavas de fuego con los besos
de mis adentros… A trancas y barrancas me despeñaba por los senderos de su
amor, corriendo siempre entre cenizas encendidas, mi mente escuchaba sus
pensamientos urdiendo el momento de alejarse de mí… Te odio y te quiero tan
sólo por momentos…Lo sé…Maldigo tu suerte y tu sueño si piensas alejarte de mi…
Estaba envuelta en una continua zozobra de inseguridades que angustiaban mi
vida, sintiendo alfileres punzantes que me carcomían poco a poco, tiñendo mi
alma de puro veneno…¡Oye tú! ¿Quién yo? Sí, sí, tú…Tengo miedo de perderte,
necesito verte, son muchos días sin saber de ti y muero lentamente en un sin
vivir agonizante…Me ahogo…Me asfixio sufriendo esta pesadilla cada instante… Me
hierve la sangre fluyendo por salir al encuentro de otros besos que me salve de
éste tormento y me aleje de ti…pues…No puedo contener éste dolor ciego, mis
piernas flaquean solo pensando que puedas abandonarme…Besar a otra, tenerla en
tus brazos, mirar sus ojos como me mirabas a mi...¡Odio al mundo entero! No
quiero vivir en éste continuo desgaste de salir a tu encuentro sabiendo que
luego te vas…Me tienes y me descuartizas los sentimientos al máximo sabiendo
que soy tu esclava, la más abnegada y encarnizada que siempre estará junto a
ti…Te juro por mi santa madre que está en los cielos, que pienso arrancarte de
mí, hundirte a los infiernos y te quedes todo preso y mueras por mi
existir…Siento una fuerza brutal en mis ojos como puñaladas de acero…Te veo caminando
a ciegas en mi pecho como arpón seccionando mis besos en pura lujuria para tus
pasiones ocultas… Tengo que deshacerte en mi cuerpo con este veneno que me está
matando, y te juro por mis ancestros que te arrastro conmigo hasta los
mismísimos infiernos antes que dejarte suelto…Tantos días sin verte es como si
me clavaran alfileres pensando en tus besos, los que me faltan para seguir
viviendo…pues…Hay una tormenta que barrunta en mi alma que no me la puedo
arrancar...Me llamas, me gritas y me piensas y no sé hasta cuándo podré
soportar…Viviendo entre rayos y truenos, tarde o temprano en mi cuerpo
estallarán...Chispas saltan por el aire cuando te arrimas a mi despertar…Te veo
escondido en mis sueños como ese demonio que vive entre dos fuegos y al que no puedo
renunciar…Te deseo como llama ardiendo que quema mi boca que está toda ansiosa
de volverte a besar...Ven enseguida a mis brazos que están vacíos de tanto
esperar…Vuelve de nuevo a mi lado que necesito tenerte entre mis piernas por
una caricia más…hay un volcán anclado en mi pecho y al que sólo tú sabes
apagar…Y esa calma después del alba cuando amanezco contigo en mi cama y mi
almohada…la rompo a pedazos sentándome en tu vientre con la furia de mis
entrañas, que voy despejando cada maraña de tus ensueños con la destreza de mi
lengua, acariciando cada pedacito de tu cuerpo con la delicia de mil besos,
oyendo tus gemidos entre suspiros y bamboleos, creciendo tu deseo en mitad del
camino donde me ensamblo con el descaro de mi cuerpo, y juntos remontamos las
olas como carros de fuego, yo como gaviota libre y tú el timón de mis vuelos…y
antes de llegar a lo alto de cielo, te arranco los gritos de tu pecho con mis
alas al viento…
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