domingo, 7 de enero de 2018

CON MI LENGUA DE FUEGO.- (MICRORRELATO)



Ayer te amé, ¡vaya que sí! Que te amé con ansias y frenesí…Estaba deseando pillarte, ¿te enteras? Comerte a besos la boca, ya sabes, besarte como una loca, como si estuviera poseída por esa fuerza desconocida que se me escapa de las manos…Que cada vez que te veo cerca de mi candelero se me nublan los sentidos, los ojos se me emborronan y me embriago de deseo por ti con unas ganas tan grandes que dudo hasta de mi propia integridad, no lo sé, pero quisiera emborracharme de ti hasta hartarme de darte besos…Esos besos que te gustan tanto de mí cuando me pongo melosa…Sí, sí…Los que te doy mirándote a los ojos con lujuria y deseo jugueteando con tu lengua en una batalla diabólica y sin compasión, ¡pura pornografía lasciva entre tu lengua y la mía entre llamaradas de fuego! Tú con tu sable de acero y yo como dragona de las mazmorras del infierno… Dándote a entender que me vuelves la cabeza del revés, dejándome hacer lo que quieras con mi cuerpo y mi honradez…perdiéndome entre tus caricias y mis risas…pues…Me enciendo cada vez que te veo pasar por delante, me traes por el valle de la amargura, siempre pendiente de tus andares, tu cuerpo, tu porte… ¡Todo! Absolutamente todo me atrae de ti de una manera que me provoca a pecar…y como una gata en celo te persigo por los senderos, olisqueando tus pasos por las calles, buscándote…Y por eso me arrimé a ti cuando te vi caminar frente a mí, que te miré de arriba abajo haciendo gestos elocuentes con mi boca para que te imaginaras lo que te haría si estuvieras conmigo a solas, ¡fíjate en lo que me has convertidos! Que parezco una buscona de esas que van a la caza y captura de hombres solitarios y huidizos…Esos que aparentan ser felices y están tan arruinados como yo a la hora de amar con pasión…pasión abocada a morir en un mal querer…y es que me insinúo como para devorarte, cogerte por mi cuenta y hacer de ti lo que quieran mis hambres, porque hambre tengo de ti cada vez que te huelo, que te aspiro todo entero y te dejo expuesto a lo que me pide el olor que echa tu cuerpo, ¿te enteras? y me pide unas cosas que si te las dijeras te quedarías pasmado…pues…Como una perra me siento siguiendo tu rastro por la tierra y el pavimento…y por eso… Te sigo echando fuego desde mis adentros…Me miraste, te miré y te planté cara…Ven y sígueme te dije al momento…Ven que sé de un sitio donde sólo tú y yo estaremos…Había gente alrededor mientras caminábamos juntos por la calle…Una parejita de adolescentes estaban delante besándose y cuando oyeron nuestros pasos disimularon su abrazo y yo picardeando contigo, te paré, me puse de frente y te di un mordisco en toda la garganta como una loca…pues… Loca me volviste desde el primer día que me conociste, que no hay segundo maldito que no te sienta en mi ombligo como si fueras mi niño…¡Mi niño, mi niño…! Te dije aquél día agraciado cuando arremetí con tus labios y desde entonces te hice mío, atándote a mi cintura de por vida… Ya nos podemos separarnos mi amor… Ya no hay fuerza humana ni mayor que me separe de ti, que ando rabiosa perdida esperándote cada día para estar contigo…Ven esta tarde conmigo al valle… Y te seguí cuesta arriba, admirándote mientras caminaba delante mía…A veces te vuelves y me miras, cerciorándote que estoy a pocos pasos, y yo que sé de tus prisas te sonrío, te guiño un ojo y te digo con mi lengua viperina…Tengo ganas de darme un atracón de ti…Me sonríes  nervioso, mirando por todos lados…No puedes resistir esa ansiedad que te da, que te paras y me arrancas todos los besos de la boca, te arrimas a mi cuerpo y me tocas entre las veredas de las piernas prestas a seguirte a donde me quieras llevar…Te miro a los ojos y te sonrío como serpiente a su presa…y me dices…Eres mi encanto…me tienes hechizado…eres como una flor que aromatiza mis canas…me encanta tu vitalidad…me gustas a rabiar…me tienes enamorado perdido…Y yo que te escucho con mis ojos tiernos te digo y repito hasta la saciedad…Te quiero y te querré mientras viva, hasta que la muerte nos separe…eres la esencia de mi existencia, mi agonía, mi vivir…sin ti no soy nada…Y por eso me encuentro aquí, caminando a pocos pasos de ti, admirándote…¡Míralo con su sable de acero en alto, todo regio, fuerte y bien dotado! Ese sable que brilla acharolado va trampeando entre llamaradas de fuegos, tanteando el terreno, rozando a la dragona que guarda la mazmorra... Una lucha de titanes se cierne entre ellos…Y yo que soy cancerbera pasajera del momento, lo desarmo con la poesía de los versos ardiendo y se derrite el acero con mi lengua de fuego…

No hay comentarios:

Publicar un comentario