domingo, 8 de julio de 2018

LAS IRAS DE MI TEMPERAMENTO.- (MICRORRELATO)


No quería hacer caso a la intuición esta maldita que tengo que todo me lo vaticina como si fuera cosa de brujería...No quería creer lo que ya sabía de antemano, era tan profundo y sincero el amor que sentía por ti que me negaba a creer que estabas con ella, y ya ves, al final tú mismo me lo has dicho cuando te has cruzado en mi camino, porque venía de estar con ella, ¿verdad? Lo sé…ya sabes cómo somos las mujeres enamoradas, que las cazamos al vuelo…debe ser que tenemos las antenas puestas siempre…claro que eres tan torpe y evidente con tus continuas dilaciones…tú mismo te delatas…esas respuesta evasivas cuando te pregunto…ese mascullar entre dientes cuando hablas bajito, tan bajo que apenas te oigo, pero escucho con oído mental, ¿te enteras? Lo he leído en el halo que te rodeaba, en el gesto de tu boca, en tus ojos de mirada incrédula…No esperabas verme pasar y ese asombro de las facciones del rostro te han delatado de infiel y renegado…Todas las explicaciones que una vez te pedí, hoy me las han aclarado tus andares por pasajes tórridos... el cuerpo tenso y la actitud de verte descubierto...¡Qué falsedad desprendías al caminar…! Cuanta hipocresía cuando me decías que me querías, que me amabas y que te gustaban mis ardientes besos…Burdo y desleal hombre de poco bien y mucho mal…Lo que no comprendo es que sin tener nada que perder, has seguido conmigo y con ella, ¿qué pasa? ¿No tenías bastante con una mujer? Si no me querías habérmelo dicho, que me hubiera ido de tu vida…y la de ella...Quizás tengas miedo de perderte entre tus enredaderas, pero…¿sabes qué te digo? ¿Qué, qué me vas a decir? ¡Míralo, ya le salió el ego varonil! Que…de ahora en adelante actuaré como tú, ignorándote... como si nunca te hubiera conocido, como si jamás hubiéramos pasado noches locas de amor…pues…Hoy cuando te vi pasar de frente, nuestras miradas se cruzaron sin decir nada y tú que me conoces tan bien, adivinaste mis pensamientos…Mil revelaciones vinieron a mi mente rompiéndome el alma a pedazos…Las piernas me empezaron a temblar, apenas podía seguir andando, dardos puntiagudos directos al corazón…Quería morir, desaparecer de éste mundo cruel donde sólo fui yo la que se dio…¡Por Dios…! No sabes cuánto daño me has hecho, ni cómo he sufrido con tus absurdas estrategias…ni te imaginas por lo que he pasado…pues…Nunca te negué un beso, ni un abrazo, ni siquiera horas de sexo compartido en cualquier callejuela intransitable, un banco del jardín en noches oscuras o rincón del portal, donde con la luz apagada nuestros suspiros se silenciaban…y tú siempre me sellabas la boca con tu lengua insidiosa para que se me abrieran las piernas y te dejara pasar hasta el fondo de mis entrañas, que cerrándolas prietas te quedabas preso como ladrón de inocentes almas…Ahora que sé que no me quieres, ahora que me di cuenta de todas tus mentiras, ahora que desperté a la realidad, ahora ya me puedo marchar y dejarte salir de mi vida sin volver la vista atrás...Al fin abrí los ojos de la mente y cerré los del corazón que allá donde tú ibas, te seguía como paloma perdida en alta mar…pues…Me engañaste, me llenaste la cabeza de fantasías y amores secretos y lo único que tú querías era hacerme tuya de por vida... Y yo que estaba tan enamorada me creía todas tus palabras porque las sentía como si fueran mías, las que te decía cuando me abrazabas…y aunque sabía de antemano que te escondías tras el entramado de tus bagatelas, tarde o temprano te iba a descubrir....pues...Me haces pensar mal y ese mal pensamiento se adueña de las jaculatorias que vuelco al viento como puro veneno para tu cuerpo y el de ella, que sepan todas las mujeres que eres un mercader de menesteres aledaños, esos que no necesitan esfuerzo alguno, tan sólo echar la caña y esperar pacientemente que pesque la más inocente y atrevida de ellas…como yo, que aún sabiendo que te veías con otra, seguía contigo porque te amaba…Sí, sí…te quería con toda mi alma, y tú lo único que has sentido ha sido mera morbosidad, sexo puro y duro compartido por la doblegación de mi amor por ti...Te he querido y odiado a la vez, toda yo era como una herida sangrante y mortal…hasta ahora...pues...Ya no podrás seguir fingiendo conmigo porque al final se ha quedado al descubierto tu infidelidad, pero fíjate qué cosas más curiosas, que una vez descubierto, de repente te has ido de mi cabeza, y lo que es mejor, de mi alma y mi corazón…Es hora de partir, de dejarte ir, de sacarte de mi vida, de decirte adiós…Ya no tendrás más besos míos, ahora pertenecen a los que quieran mis derroches...y por eso ya puedo caminar a mi aire, tranquila, y aunque me duela el alma, pienso renacer de mis cenizas con las letras de mis fantasías…pues...Hoy se despertaron las iras de mi temperamento y se enfurecieron los juramentos…

No hay comentarios:

Publicar un comentario