domingo, 3 de junio de 2018

EN LAS SIENES DE MIS SUEÑOS.- (MICRORRELATO)


Ya no puedo soportar más que te duela mi ausencia, no puedo…Sentía en mi pecho unas punzadas que me atravesaban el alma…¡cómo me dolía madre mía la garganta…! Apenas veía a las personas que me saludaban cuando se cruzaban conmigo, tan sólo lo buscaba…pues…Podía sentir en su boca mis ausentes besos…me ardían los labios…yo sabía que estaba perdido entre la gente con ganas de mí…lo conocía tan bien…Y por eso salí enseguida en tu busca, tenía que encontrarte para decirte cuánto te quería…y te quiero, ¡vaya que te quiero! Que ando como loca por la casa hablando sola con las paredes…y con tu sombra, ¿te enteras? que no pasa un sólo momento que no estés tras de mí persiguiéndome en los pensamientos…No sé qué hacer ni cómo salir de éste embrollo que no tiene ni pies ni cabeza, no hay quien lo entienda…El caso es que andando los caminos, de repente me encuentro con tus brazos rodeándome la cintura, presionándome en un vaivén de cautividad a la que no me puedo resistir…pues…Me encantaba sentir toda la pasión que transmitían sus atrevidas caricias hacia lo más profundo de mi ser…Era de lo más provocador y excitante a la vez, al mismo tiempo que su boca y la mía se balanceaban en un requiebro de frases ininteligibles, de las cuales tan sólo me despegaba para respirar aire…¡Aire, aire! Necesito aire fresco para mis pulmones que estan llenos de fuego y me quema hasta las puntas de los cabellos…Toda yo soy una mecha ardiendo cuando siento tu aliendo alrededor de mi cuello…¡qué besos tan ricos…! me encantan…¡Cómo me gusta que me lo recorras susurrándome palabras de hombre enamorado…! Entregado…hechizado por las ansias que despiertas en mí…en mis carnes…me conoces ya tan bien…Sabes perfectamente qué decirme en cada momento y qué tecla tocar de mi cuerpo…Eres como ese encantador de serpientes que se ven en las calles de Oriente…pero…yo soy la única que te pervierte tocando la flauta…tu flauta…Parecíamos unos adolescentes en sus primeros roces sexuales, donde las pasiones se disparan hacia lo prohibido…Nunca me cansaré de ansiarte, mi amor, de quererte hasta que te arranque de mis entrañas y me lleven al olvido…hasta que se paren los latidos de mi corazón…yo siempre ahí…Me dice entre sueños las voces del anochecer en el silencio apagado por la oscuridad…Estamos locos, somos unos pervertidos, incansables e indómitos amantes de lo prohibido…No, no…eso no…pues…Tan sólo nos necesitamos para seguir viviendo como cualquier pareja normal y corriente, como si eso pudiera ocurrir alguna vez, que ni siquiera por casualidad se daría ese caso normal…Estábamos a la merced de los deseos persistentes de nuestro cuerpo que sin poderlo evitar nos hacían preso, y como en una cadena de circunstancias prohibidas, saltábamos a la deriva del amor que sentíamos tú y yo…Y por eso me hallo aquí, clamando justicia para mis cuentos, mis relatos que le dice al sueño…No quisiera despertar jamás de esta eterna juventud que siento en mi existir…Ten piedad de mis humildes versos rotos con la sangría que hago de ellos destrozando la prosa narrativa de la poesía cuando le grito al tiempo…Te imagino buscándome como ese eterno enamorado, joven o entre cano, con arrugas en el rostro y andar pausado, lo mismo que yo, que a pesar de los años, mi corazón late como mocita en la edad del pavo por un beso de mi amado y así, como en aquellos cuentos de hadas que leía cuando me creía princensita encantada, sigo esperando a mi caballero armado con escudo y espada para que me alce en volandas a la grupa de su caballo, apoyada mi cabeza a sus espaldas, escuchando las palpitaciones de su pecho en las sienes de mis sueños que me traspasaban el alma, y me lleve trotando donde no se oiga nada más que los suspiros de la noche oscura bajo la luz de la luna…¡Oh madre mía! ¿Cuándo dejaré de ser una niña? Todavía creo que mi amor será para toda la vida y aún no me he dado cuenta de que los años se me echan encima y que hay que ser realista…Me niego, me niego…todo mi ego ancestral, desde los pies a la cabeza se niega a madurar…pues…Soy la causante de sus locuras y aventuras pasajeras llenitas de frases frescas, donde no hay mención a las palabras honestas, tan sólo una socarronería de halagos y caricias desde la boca hasta las piernas pasando entre ellas…pues…Gritos, suspiros y gemidos se mezclan en un variopinto mestizaje de lujurias y besos salvajes…Bésame, bésame…le dijo junto al oído atrayéndole a lo fiera…y él me abraza con fuerza y me contesta…reina mía…mi reina…y me amarra a su cintura y me hace suya…y yo que lo quiero tanto me entrego sin reparos…y sin verguënzas…en un abrazo infinito de tirabuzón…

No hay comentarios:

Publicar un comentario