ENTRE DEMONIOS Y DIABLOS.- (MICRORRELATO) 2º

Te alejaste por un mal comentario, unas palabras desafortunadas, quizás más mías que tuyas, no lo sé, pero a mí me la sacaron la rabia de tu sincero querer…Tenía que hacerle saber de alguna manera que nuestro amor era imposible, pero que podíamos seguir siendo amigos, hablar por teléfono, incluso darnos besos, pero se ve que no le gustó la idea y por eso me encuentro tan decaída…y sola…Te dije que me molestaba tu olvido…Me dijiste que no me llamabas porque estabas acompañado…y con mi silencio te dije te quiero sufriendo por ello…Me dijiste que para eso seguías libre…y te dije que yo de pensamiento y de amor sincero también, pero que tenía el corazón abierto…Me dijiste que lo dejara todo por ti…te dije que era mayor que tú y no me atrevía…Me dijiste que tenías una vida llena de experiencias y que no te importaban los años que nos separaban…demasiados mi amor, y yo para eso soy muy mirada…Me dijiste que me querrías hasta que nos despertara la luz del alba…te dije que entonces verías todas mis marcas señaladas en la cara y me dejarías a la otra mañana…Me dijiste que me querrías siempre, que era tu niña, la niña que siempre habías soñado…doce años de edad te llevo, doce años que ahora no parecen nada porque estoy delgada, fina y bien formada…Me dijiste que las jóvenes no te atraían, que te aburrías con ellas y en mí encontraste la felicidad completa…que te diera la oportunidad de vivir en pareja, que me dejara llevar por el momento…No, no, no, algún día lo entenderás y hasta me lo agradecerás…No quiero hacerte daño, no te enfades conmigo, compréndeme un poco…Sabes que te quiero, que te adoro, que eres el dueño de mis pensamientos, pero, por favor, déjame vivir en paz que me tienes la vida cruzada del todo…No quiero esconderme de mis amigas, quiero estar contigo con la mente relajada y sin mirar atrás, porque delante ya sé lo que tengo…y lo que tengo son años, muchos más que tú, y no quiero ni pensar levantarme una mañana y no poderte mirar…o yo ante el espejo…éstas carnes flácidas, el rostro surcado de arrugas, no podré ni besarte mi amor…Ahora me ves bella, linda, todavía con la piel lisa... No podía seguirte, te eché con mis frases atrevidas, te echo de menos, jamás te he olvidado…siempre en mi mente…siempre aquí presente…Morir de amor, matar por amor…por amor muero yo…No, por amor no, por sus suspiros que me persiguen a lo largo del camino como si fueran los flecos de mi bufanda, porque los siento pegado a la piel y cuando hace viento, se convierten en besos alrededor de mi cuello, y me atrapan hasta los pensamientos, enredándose entre los rizos de mi pelo negro de lo mucho que lo quiero…Tengo una pena escondida dentro de mis lamentos, un secreto inconfesable que no puedo desvelar a nadie, tan sólo lo sabe las telarañas que tejen las arañas en la maraña de mi cabellera blanca…Llévame contigo amor mío que sin ti, vivir ya no puedo…Me encandilaste con la armonía de tus besos, me contaste tus pesares, tus tristezas, tus soledades… y cada vez que me miro al espejo te veo abrazado a mi cuerpo somnoliento…Te siento, te llevo hasta en lo más profundo de mis miedos y por eso me encuentro vacía, sola y…descarnada por dentro…Yo tenía una vida enturbiada de mal vivir, estaba poseída por una sed insaciable hasta que lo saqué de mis antojos, mujer caprichosa de aventuras y amores locos…¿Sabes cuántos años llevo esclavizada a sus caprichos? ¿Tú sabes lo que es estar sometida a un querer? Pendiente de sus ganas, sus perversidades, sus malos royos, sus quejidos, sus necesidades…¿y las mías? Se han preguntado alguna vez si yo quería o no quería o simplemente no me apetecía…¡Venga ya tío! que me tienes mareada y loca perdida con tantas exigencias mal compartidas, con tantos camuflajes tras las vías…que yo lo que quiero es vivir la vida tranquila, así que no me vengas más con esa cara de perro apaleado y búscate otro hueso que roer, que los míos están casi en las últimas, que yo ya no quiero seguir metida en tu piel, que para eso tengo yo ya la mía…Y desde entonces voy cantando por Rocío Jurado…Hace tiempo que no siento nada haciéndolo contigo…¡madre mía…! Estaba loquita de contenta con mi vida. Una vida llena de alegría y entusiasmo por la independencia que estaba disfrutando desde que lo dejé salir de mi piel…Hasta que lo conocí bailando un tango lento, me arrimó a su cuerpo y me arrancó todos los suspiros del pecho…Como una ola llegaste a mi vida, como una ola…me enamoré y lo besé…y una cosa llegó a otra…Y por eso me preguntaste después de aquello…sonriendo… ¿Y ahora qué es lo que va a pasar? ¿Qué haremos?… y te dije…Te seguiré dentro de mi libertad, sin obligaciones y cuando me harte te dejo…De acuerdo…¡Mentira! No me deja, me persigue, me espía y me busca…hasta que me encuentra y otra vez volvemos a lo mismo y yo no quiero, pero no se da por vencido…Estoy harta de esconderme, me da vergüenza que me vean mis amigas, pero a él no le importa porque me quiere, me quiere…dice que soy suya hasta la muerte…Y por eso lo he abandonado, lo he echado de mi lado, pero el siempre en mi mente, siempre, siempre…Y cuando llega la noche lo llamo con el pensamiento…Vuelve tan sólo un momento para besarte de nuevo, ven rápido, antes que amanezca, me despierte y salgas huyendo de mis entretelas…llena mi vida de besos, de esos momentos mágicos otra vez…que te espero con los brazos abiertos…y las piernas semidesnudas…Pero cuando me dijiste que cada sábado te ibas de recreo, me sacaste todos los demonios que llevaba dentro… Ahora mismo me voy a la cama con un amigo…Y por eso me dejaste de querer al instante…o quizás fue un rebote sincero…¡Qué cosas por Dios! Que un hombre pueda hacer con su cuerpo lo que le venga en gana, y una mujer tenga que pagar con quedarse con las ganas, ¡muchas ganas! ¡Las misma ganas que las de él! Y eso le enrabia, le enfurece y casi la mata…como si no tuviera derecho a nada más que a un simple deseo…o ni eso, porque sólo de pensar que me hayan besado otros labios, es que te llevan los diablos que te corroen por mis encantos…

CON LA TINTA DE MI TINTERO.- (MICRORRELATO)

Se alojaron tus abrazos en mi cuerpo y los tengo repartidos entre mi pecho y mis pensares, no dejan de acariciarme desde lejos, tendrás que venir a por ellos porque no puedo componerlos, y es un verdadero tormento sentirlos y tú no estás por tenerlos... Tendré que darle vuelos para que los atrape con tus besos y me los traigas por la noche cuando me duermo…Pienso darle vida y aliento a éste deseo que me está quemando el pecho...pillarte desprevenido y traerte conmigo entre sueños…Te encontraré, me lo dicen mis cinco sentidos, esos que abordan a las mujeres soñadoras como yo…que siento lo que cuento y escribo con las palabras abocadas en mis recuerdos…Son las flechas de Cupido…Verdes prados para el amor, verdes praderas sin fronteras, altos montes y picachos donde mil ojos me observan…Están espiando nuestros pasos…Verdes campos para seguir retozando como una quinceañera, y el sol generoso resplandece con todos sus rayo, y me acalora el rostro a través de tus manos…Manos inquietas, vacías y llenas de deseo por acariciar mi cuerpo a la merced de tus besos…Esos besos que están pendientes de un hilo por llegar a mi boca…dámelos todos mi amor, que tengo frío…Y tus labios me abrazan gritando desde lejos…Necesito tan sólo un momento para hartarme de ti…y yo mientras tanto suspirando…Y te dejo hacer bajo las tempestades de mi piel, dejándome querer entre tu agonía y mi sed…Sed de ti, de tus labios ricos y hermosos…Sé que me deseas mi amor, aún estando tan lejos te siento junto a mí…Y yo aquí viéndote venir, sintiéndome bajo tu cuerpo nervioso y hambriento de mi…Como un águila de rapiña te lanzaste en picado sobre mis alas blancas…y yo, que estaba perdida entre las tempestades de mi vida, caí rendida en tus brazos como paloma volando en nubes de algodón… Revuélveme el cabello, besa mi cuerpo expuesto, enrédate entre las sábanas y recorre mis piernas hasta que yo te pare con la agonía de mi almohada…Rómpeme los gritos que se me escapan con la locura de tus besos…y luego dime al oído esas palabras rotas que salen a media voz…Tengo que hartarme de ti mujer…Mujer loca y atrevida que entregué mi cuerpo a la primera cita…Fue una cita a ciegas, me pusiste una venda para que no viera tus verdaderas intenciones escondidas tras tu sonrisa…Sonrisa tierna, dulce y traicionera que asoman cuando ven a la presa fácil… Una cualquiera…Murmuran por ahí…Una de esas que se encierran bajo la piel de ésta… Esta que se da pensando que ha encontrado al hombre de su vida...Es un buscavidas, un lobo estepario, un águila oteando el horizonte…Se fue, se fue…y yo sigo esperando con las manos llenas de palabras y vacías de su querer, pero ahogadas de su sentir…porque a veces…Siento como si me siguieras continuamente, te veo en el aire, siempre te veo…es un rostro sonriente con los ojos grandes, azules y llenito de juego…ese juego que de niña en la calle me hacía saltar de entusiasmo y alegría, chillando con todas mis fuerzas agarrada a un árbol para que vinieran a rescatarme…porque cada vez que te pienso se me salen los suspiros del pecho como si pudiera estar contigo todavía…es un frenesí, un alma mía de mi vida que ya llega, que ya está aquí…y no puedo más que sonreír sabiéndote que tú te acuerdas todavía de mí…pero…Le diste olvido y yo le di sentido, pusiste tierra por medio y yo le di todo mi cielo, pusiste mujeres y bailoteo, placer y mucho sexo y yo te dije te quiero y salí de mi encierro, te mostré todo un espacio abierto, y te abrí las puertas de mis secretos y ahora estoy buscándote por los caminos de los recuerdos, que voy como loca…Si tú supieras las ganas que tengo de cogerte por mi cuenta, y hacer lo que me da la gana contigo y luego dejarte tirado como tú has hecho conmigo, te ibas a enterar bien de lo que duele un malquerer… pero…Ya nada ni nadie podrá detenerme, ya elegí el camino a seguir, y mi camino es sin ti, pasar página a la vida aquella…que ahora sé lo que es la libertad de sentirme plena y segura, y con la alegría de haber conocido a ese hombre…que fue un flechazo, ¿te enteras? Y si se me apetece me voy de cena…o quizás amanezca desayunando entre suaves sábanas de algodón…o…¿quién sabe? Mejor será que decida el corazón…pero…Tendrás que sorprenderme y volverme a enamorar, porque yo estaba pasando por un mal trago y te aprovechaste de mi estado emocional…Estaba perdida entre las arenas movedizas de mis emociones, pero nada más verte me dije…Éste es mi hombre…que con un solo beso te arrebaté hasta los pensamientos, que lo llevas grabado en la garganta, junto a la campanilla, que no hay día que no te despierten sus tañidos…los míos…que cada mañana, antes del alba, desde mi ventana toco la campana con la pluma de mis alas, le soplo y allá que salen en volandas…¿Qué me has hecho mujer? Me dijiste una vez…Que me has robado mi querer…¿Qué me has dado? Que me has envenenado…¿Qué le pusiste en ese beso? Que ya no quiero otro que no sean los tuyos, los que me embelesaron el pensamiento con el roce de tu piel…Quizás no sea para tanto tu querer, sueño infinito y sin piel, que no lleva a ninguna parte, pero que a mí me hace tanto bien, sobre todo en el recuerdo, cuando abrazada a ti me veo y te siento, que hasta se me eriza el cabello, y me dan ganas de saltar por la calle pensando que tú sigues esperándome en el jardín aquél, donde te besé por primera vez…Fueron los besos más hermosos de mi vida y los tengo ronroneando a mi alrededor como un gatito mimoso y sutil…Y yo que aún te desconozco tan sólo te lanzo la mirada llamándote con la zarpa de mi deseo…deseo siempre ardiendo por ti…Ven amigo mío, vuelve a mis brazos, mira que soy como una paloma…Una paloma mensajera que lleva en su piquito una hoja con todos mis versos escritos, y cuando llega la tormenta se enredan entre ellos y caen a la tierra como lluvia de mayo…Son mis lágrimas de fuego, de tanto como te echo de menos, que te llaman y te hablan al oído…Oye, pon tus cincos sentidos en mis poemas, y escucha bien lo que te dicen cada verso que escribo con la tinta de mi tintero…Te invitaré a mi casa…te sentarás en el sofá…Ponte cómodo, que ya verás el café que te voy a preparar, y cuando estés bien calentito te mostraré cada rincón de mi habitación, mi cama y mi corazón…Échate a mi lado y juntos recorreremos cada secreto, esos que tenemos escondidos en los sueños de los amantes…pero antes de decirme los tuyos, te diré el mío y tendrás que hacer todo lo que te cuente en el oído…no vale hacer fullerías, ni decir que no sabes…seguro que en eso eres bien instruido, y si te equivocas, tendrás que repetirlo…es un juego fácil y sencillo, además de divertido, así que atento, no te distraigas y pon tus cinco sentidos, que es como un concurso de versos, donde sólo las palabras harán de las suyas, a ver cómo te las apañas…y nada más que empezar mis hazañas de decirle al oído lo que quería perdió la compostura y tuvo que estar repitiéndolo todo el día…

CON LA ESENCIA DE TU PRESENCIA.- (MICRORRELATO)

Fuiste como una bocanada de aire fresco en mi vida tan vacía…un soplo marinero, un hormigueo, un beso prohibido… y mi primer cigarrillo…esa boquilla que yo aspiré marcándola con el lápiz de labios, y que tú te llevaste a la boca mirándome con alevosía y descaro…y mi primer roce bajo los encajes de mis enaguas al vuelo, escondidos tras la puerta en aquél guateque… Y ahora, después de tantos años me abrazo a ti, con un ojo cerrado y otro abierto mirando a través del cristal, donde tu boca y la mía se reflejaron en el espejo aquél, cuando tú y yo nos encontramos por primera vez, en la barra de una bar donde tomamos café…Tendré que pintar en el cielo un pentagrama con las letras de un amor sincero para que tú las leas y me llames corriendo…Dame una cita mi amor, que necesito besarte de nuevo, y quizás haya algún imprevisto más…porque yo…te deseo, ¿te enteras? Te espero, no sé por qué, pero aquí estoy aún, creo que un día volverás por mis besos...te gustaron, lo sé, te encantaron y embelesaron tu mente…Fue un impulso más de mis cinco sentidos, sólo eso, pero lo suficiente como para el retroceso tuyo, porque yo para ti tan sólo fui una más en tu camino, quizás una piedra que te saltaste sin mirar atrás, ¡fíjate que cosas me ocurren! En cambio, yo aún estoy pendiente de un hilo, pensando que en ese salto podrías caer sobre mí…Y tengo la fantasía de mirar hacia arriba, allá donde tus pies casi me aplastan y tenga que soportar que ya no me quieras pisar más…pero…Saliste corriendo muerto de miedo cuando te conté mi vida…¡Ésta mujer es de las mías! Porque lo que me ha dado a mí no quiero ni pensar que se lo dé a nadie más…Y me quedé solita y con mi pena, hablando con las hojas en blanco…Qué prontito me has olvidado, se ve que eres hombre de pájaro en mano, esos que suelen decir… más vale lo malo conocido que lo bueno por conocer…¡Pues yo no! Que yo soy de cientos volando porque todos se me escapan de las manos…que yo soy de las que piensan lo bueno por conocer…porque lo malo ya lo conocí…y cuando me conocen bien salen huyendo por los aires como alma que lleva el diablo…quizás se asusten de tanto querer…o es que no sé darme a valer…o…teman no estar a la altura de la naturaleza de mi querer…vaya usted a saber por qué…Y por eso saliste por piernas…porque te bebiste la esencia de mi presencia…Me robaste el aliento, mis caricias, mis ganas de ver otro cielo, porque sin ti ya no existe en el universo y ya no puedo decirle a nadie que lo quiero, más que a ti...y por eso desfallezco…Te besé con el placer que da la fuerza del querer, que sin conocerte, te quise…Me entregué con gusto y con la juventud de mis labios carnosos, que te quedaste prendado de mí y te llegaron a rendir del todo…Tu cuerpo sanote y hermoso, tus sentidos, tu estilo de vida te dieron la vuelta, te dejaron medio loco de pasión…Te quemé las pestañas con el pensamiento sin palabras y leíste lo que mi boca callaba…Nadie te ha sonreído como yo, ni te ha mirado a los ojos como yo…Ni te han besado como yo...Con ganas, con entusiasmo y con ilusión…y con risa, porque yo me reía ¿sabes? Que me daba la risa de verte tan entregado, y tú que lo intuías también me sonreías con esa de picardía, que te entró un nerviosismo, todo eufórico perdido, una alegría que te salían los pensamientos nada más verme doblar la esquina…que nos pusimos morados a besos…y bocados lentos…sugerentes…y de terciopelo…y más porque había gente por medio que si no…Venga, tráemelos, devuélveme mis besos, me los robaste y ya me he quedado sin ellos…y hay alguien por aquí que los quiere de nuevo…Y si tú no vienes, él me arrastrará a los infiernos…Y no podré pintar un pentagrama en el cielo…Sé que al final me convencerás, lo sé porque ni tú puedes aguantar, ni yo podré seguir viéndote frente a mí, suplicando limosna de amor, casi arrastrándote por cada paso que doy, unas veces haciéndote el indiferente, otras con lágrimas en los ojos y yo que me encuentro en el mejor momento de libertad, al final me harás tambalear…Nunca te vas a dar por vencido, porque te crees que soy de tu propiedad, y es tanta la fuerza que le pones a tus insistencias que me rendiré a tus pies…no puedo verte llorar…pero…Ya no puedo besarte, ya no puedo quererte, me has robado el amor, me has quitado el sentirte, me has arrancado el corazón de cuajo, me has dejado sin alma, me lo has quitado todo, me has desarmado y ya no tengo sentimientos ni deseo de querer darte un beso…¡Venga esa escala musical a mis cabellos! Que tengo que dibujar un pentagrama en el cielo con todas las notas del solfeo. ¡Corre, pronto, rápido! Ven enseguida que hay un entrometido que me quiere robar la esencia de tu presencia en mi vida. Se la quiere llevar porque se cree que es el dueño de mi cuerpo, y quiere cobrar impuesto con el registro de mis besos…Y llegó a la velocidad del trueno y casi me estampa contra el viento, que me pasó una mano por la cintura y otra por el cuello, y me dio un beso que me supo a miel con queso, elevando mis suspiros hasta el cielo, y me desgarró la garganta de tanto como me gustaba…Más de mil mariposas atravesaron mi alma, mi corazón…y mi cuerpo…que me lo dejó a punto de caramelo… ¡madre mía, qué beso más rico y más bueno! Y éste hombre que se creía el dueño de mis caricias se echó las manos a la cabeza como diciendo…He perdido a la mujer de mi vida...La eché a la suerte de tantear los terrenos prohibidos, de saber si me era fiel, de ponerle tantas trampas, de darle celos mirando a otra mujer tan sólo para saber hasta dónde llegaba su forma de querer, y ahora que lo sé, maldita sea mi estupidez, que de tanto ponerla entre la espada y la pared la perdí para siempre y ya no se fía de mí…Ahora te aguantas con tu dolor, que tienes la culpa de todo…porque…Hay una escala musical danzando a mi alrededor que me quiere atrapar a su delirio…do, re, mi, fa, sol, la, si…Y ahora le estoy dando forma a que me llame donde quiere que esté y tener un encuentro nuevo con él…me lo debe…o quizás se lo deba yo a él…Tiene la mirada serena y tranquila, es la calma en mis aguas bravas…Y por eso me encuentro pintando en el cielo un pentagrama con las notas que me faltan para mecerme en su barca...Hay alguien por ahí que no para de insistir…me dice que sueña conmigo, que tiene fantasías eróticas y que le gustaría saber a qué saben los besos de mi boca…y yo…me lo estoy pensando…son tas seductoras y sugerentes sus formas y palabras, que me está haciendo dudar de mis motivos de moralidad…y no sé si dejarme llevar por su osadía…o por la curiosidad de atravesar las leyes de la sociedad…mejor será dejarme llevar por la euforia de la espontaneidad y lo que sea será…

TRAS EL TELÓN.- (MICRORRELATO)

Me enamoré del hombre de tu pasado, el que trapicheaba con el tiempo para tenerme en éste momento y ahora me he enamorado de ti…Y por eso estoy acariciando la idea de tener una aventura contigo…tendré que imaginar una llamada tuya pidiéndome una cita a escondidas…y le daré forma a un encuentro fortuito, donde tú y yo estamos juntos…muy juntos…entrelazados por las piernas y los brazos…y unidos por los besos de mis labios…y además de eso…mecidos por el ritmo de mis latidos…tendré que darle forma y sentido para que no parezca imaginario…ni inventado…sino vivido con los suspiros tuyos…y míos...Me dejaste tirada en el escenario imaginario de la vida retratada…Te alejaste de mí poco a poco hasta que desapareciste del todo…pero a veces te presiento acompañándome en el camino y me soplas el oído, porque noto como un airecillo alrededor de mi cabello que me levanta el flequillo…hasta siento un beso...al momento me pica el cuello…me giro…y te huelo…Yo sé que me piensas aún porque si no…¿por qué te recuerdo yo? Es imposible que una persona piense en otra sin venir a cuento, pues dicen por ahí que cuando alguien acude a tu mente es porque esa persona viene, se coloca en tu cabeza como un visitante y se queda ahí quieto, callado y como esperando algo de ti…y yo me pregunto…¿será que todavía querrá algo que decir? Porque te veo descaradamente sentado frente a mí…Éste no poderte olvidar debe ser cosa de dos, ya que el pensamiento está de por medio haciendo de las suyas para que tu mente y la mía, estén de por vida unidas…ya sea tarde o temprano…se encargará de unir nuestro destino…Quizás en un lugar recóndito de la ciudad de la fantasía…Creo que estás arrepentido de haberme dejado por una mala interpretación en el teatro, ya ves, a veces me tomo muy a pecho mi papel y le doy vida…la mía…la que siento dentro de mis pesares, el alma, el corazón…la sangre que me corre por las venas…sangre corrompida por un mal querer de la película de mi vida…Creo que quieres darme una explicación o quizás una oportunidad para llegar más allá…o que ya me has perdonado y quieres seguir siendo mi amante en éste escenario…Siento haberte hecho tanto daño cuando te dije que tú sólo me querías hacer tuya tras el telón…No te preocupes mi amor, que para eso está el autor que escribirá un buen argumento donde nos entendamos los dos…Y por eso tendré que imaginarme una vida contigo compartida aquí…sin más…Y si suena el teléfono…y si me llamas pidiéndome un beso…y si salgo corriendo y te veo esperándome en la esquina…Daré un salto, me abrazaré a tu cuello y te diré te quiero…Te anudaré con mis piernas la cintura y tú no podrás evitarlo… te rendirás como un niño…y me rodearás los muslos para sentirme tuya, me acariciarás la espalda y te daré un beso de tornillo que te llegará al alma…Y eso es lo que me estoy imaginando que pasará contigo…Y me llevarás a un sitio escondido donde no nos vea nadie, y me desnudarás los sentidos con tus suspiros…y yo te invitaré a mi casa con la esencia de mis besos y la urgencia de tu cuerpo…y te quedarás conmigo hasta que se nos agoten los gemidos…y la esencia de los deseos…Tendré que inventarme por lo menos un par de motivos, para atraerte de nuevo bajo mi abrigo, porque éste que estoy pensando, mejor me lo callo…porque la última vez que estuviste en mi brazos saliste pitando…de tanto como te gustaron…pero me estoy imaginando que nunca podrás olvidarlo y vendrás corriendo a por mis encantos, porque te quedaste prendado…Le pondré alas a las palabras para que te traiga a mi lado y me cuentes porqué te fuiste sin despedirte aquella mañana de mi cuarto y de mi cama…tendrás que inventarte una historia muy auténtica para que no tenga que imaginarme la mentira que habita tras ella…Tendrá que ser natural y convincente para que no vuelva a caer en la trampa de pillarte desprevenido y reñirte como si fueras un niño…además que tendrás que ponerle énfasis y ahínco para que te crea, te perdone y te abrace como a un hombre…porque…Estoy acariciando de nuevo la idea de imaginarme una noche loca contigo oyendo tus gritos, que seguro que serán salvajes, porque tengo ganas de cogerte por mi cuenta, y de arrastrarte por todo ese escenario…y cuando no nos vea nadie, pienso estamparte tras ese dichoso telón y comerte a besos desde la boca hasta el mismísimo talón…

EL QUE MANEJA LOS HILOS DE MIS DELIRIOS.- (MICRORRELATO)

Quisiera amanecer en tus brazos otra vez, como cuando tú me querías y yo no sabía que existías, fíjate qué trampas nos pone la vida, que estoy viviendo un futuro incierto en los recuerdos de esa extraña mujer que habita en mi interior, pues a veces no sé si es ella o soy yo la que lleva las riendas…Quizás seas tú el que maneje los hilos de mis delirios desde allí, tan lejos como estás…y por eso aún te recuerdo…Ni siquiera te he olvidado ni un momento, y ahora me apareces en el cuerpo de ese extraño que sin buscarlo me atrae hacia él, me tienta a caer de nuevo en el pecado…o es posible que me guste ésta manera de ser que tiene esa extraña mujer, que sin proponérselo me arrastre hacia ti…por medio de él…Dime que me quieres, escríbeme a diario, ven a mi encuentro y bésame los labios…Mira que hay alguien tras de mis cristales acechando…No se detiene, no se da por vencido, y me busca por los pasadizos de los escondrijos de mi cuerpo…y se coloca justo en medio de mis deseos, mis debilidades…de mis bajos instintos…Él sabe que me puede porque me lleva mecido en su sangre, y conoce cada obstáculo del camino de tantas veces como fue por su recorrido…por sus andares atrevidos, por su mirada escrutadora, desnudándome toda, entera, toda…Sabe de mis flaquezas y de mis pasiones ocultas…Lo sabe todo de mí y por eso me espera cada noche tras la puerta…pero no se atreve a abrirla porque le eché el candado y está esperando que la abra con la llave de la libertad de mis deseos…Quiere encenderme de nuevo…sabe que me dolió su desprecio…y por eso aguanta el que yo te diera mis besos, porque son besos de venganza y para él no tienen precio…no le duelen nada porque me conoce y sabe que los impuros y desgarrados, sólo los tiene él encerrado entre las ansias de los desesperados…Lo quise hasta morir…hasta degradarme por completo…hasta que se rompieron todos mis secretos…mis cadenas…se llevó lo mejor de mí…me dejó con el alma al descubierto y me rajó las carnes con la furia de los guerreros…los que matan por el fuego de la pasión…no del amor, porque de amor ese hombre no entiende nada…Sólo le mueve los manejos de sus entrañas al rojo vivo, como los volcanes a punto de explotar y eso es lo que está buscando en mí…que explote como una serpiente venenosa…Veneno es lo que llevo dentro cuando lo veo…él lo sabe…Sabe de mis furias, mis rabias contenidas…lo sabe todo de mí…hasta cuando respiro, cuando abro los ojos y cuando me quedo dormida, porque vive dentro de mi piel…Es un ángel endemoniado que tiene ese poder sobre mí porque juntos bebimos de la fuente prohibida…y tenemos los mismos demonios que nos doblegan y dominan…y por eso me agarré a ti…Necesito un inocente que me saque de ésta ruina…la ruina de mujer que se esconde a través de mi piel y sólo se muestra tal cuál es…con él…Protégeme de todo mal y ven a por mí. Sólo tú podrás salvarme, ven pronto y no tardes por Dios, que me está gritando desde lo más hondo del corazón…Es un lobo solitario vestido con la piel de oveja para despertar mi pena, y yo no puedo soportarlo más…Me conoce bien y sabe que me duele en el alma su dolor…tiene el rostro contraído, tiene los ojos enrojecidos…está llorando por mí…Se muere, se va de aquí, se le acaba la vida, sus carnes partidas…Me llama a voces, me dice que me quiere, que le perdone, pero que vuelva a sus brazos que se le está cayendo el alma a pedazos…Miente, me miente…está utilizando otra de sus estratagemas. Me está haciendo de nuevo un chantaje emocional, lo conozco y sé hasta dónde es capaz de llegar…Me tienta, está tanteando el terreno…Ven pronto a mi encuentro amor mío, si no sucumbiré porque me atraen los amores fieros, ocultos, miserables…llenos de pecados de la carne…y...Me estas enrejando las pelambreras de mi cabeza, que no quiere ni que me imagine en otros brazos, ni que se llenen de pasiones y deseos esas palabras que aterrizan como avionetas por lo alto de mi cabellera, que me apresan y me advierten que es la locura de mis fantasías…y me persigue hasta los pensamientos para que no me vaya con el hombre de mis sueños…y por eso te llamo a voces gritando…ven pronto a mis brazos, sálvame del cruento, que lo único que quiere es robarme el ardor que le pongo a mis besos...para que tú no seas adicto a ellos…Buscaré la duda entre las sombras de mis intimidades para encontrarte, me las soplará el eco de la noche…Son los reflejos de luz de la oscuridad que me guían hacia ti…Hay una nube de cristal ahí, la veo entre sueños por lo alto de mi cabeza y tú estás flotando dentro de ella, como una pompa jabonosa, y cada vez que alargo mi mano para cogerte, te resbalas hacia un lado, te vas, te alejas hasta el fondo del túnel del tiempo y no puedo alcanzarte, estás, cada vez más lejos, en la puerta de entrada o quizás sea el final, no lo sé, pero aún te puedo ver…y justo a mi derecha hay un rostro sonriéndome con los ojos muy abiertos, me mira…Me mira con los ojos alertas como dos faros luminosos…Está pendiente de mí, parece que me acecha desde el infinito…pero tú sigues al principio o al final de ese túnel del tiempo y yo no puedo cogerte, te ves pequeño y la mirada del hombre nuevo me mira con ojos llenos de risa…Es el mismo que me dejó el alma marcada con las huellas de sus besos apasionados y me acarició los sentidos con los suspiros de mi corazón…El que maneja los hilos de mis delirios, el que se enreda en mis sentimientos y se pierde entre mis pensamientos…