sábado, 5 de febrero de 2022

A LA SOMBRA DEL QUERER.- (MICRORRELATO)

 Fuimos dos almas libres a expensas del amor…nos dejamos llevar por la emoción del momento sin mirar atrás, meciéndonos en un carrusel de pasión…apenas veíamos las trampas del destino, que eran atrevidas y peligrosas…pues…Éramos como niños jugando con armas de fuego…armas llenas de chispas que saltan por los aires cuando tu boca y la mía se disparan, ni siquiera hubo resistencia por mi parte, y tú…Que todo lo enlazas con tus brazos de acero…me arrancas los besos con tus labios de fuego, y…Prendida y sabrosa te entrego los placeres del cuerpo a hurtadillas de la gente…¡Qué pena no poder vivir juntos, qué pena…! Susurraba muy bajito…Qué pena, le dije mordisqueando su cuello, y ahora que estoy solita, te veo correr entre sueños suspirando por mil abrazos que se quedaron esperando bajo el árbol aquél…pues…A la sombra de su querer te amé, y…Como si estuviera escondido bajo llave, te seguiré amando mientras no se apaguen las llamas de su enclave, y por eso…Navegando entre dos aguas estoy con las caricias de sus palabras que me queman como ascuas, y aunque quisiera apagarlas, tatuadas las llevo en la piel y en el alma…Me agarró por el cinturón para que no pudiera alejarme…me giré y lo saludé, y antes de darme cuenta, me arrimó hacia su boca y lo besé, gran error por mi parte ya que a…Éstos hombres le das la mano y te cogen el brazo, pero…Lo volví a besar, no sé si por lástima o porque lo deseaba, el caso es que durante un buen rato seguimos abrazados, mientras nuestros labios se afanaban en una exquisita batalla de seducción, hasta que me insinuó arrastrarme tras unas ramas para acariciarme las nalgas y nadar mar adentro, por lo que desistí…No…no vayas por ahí amigo mío, que esto está tomando muy mal cariz…Paró en seco, me miró confundido…titubeando, pero…Al verme firme y segura, se giró y cada uno por un lado…Hace cinco años que lo conocí, y lo único que quería de mí era manosearme como si fuera una muñeca de trapo, a su capricho y modus operandi, como si yo no tuviera nada que ver con el asunto, haciendo y deshaciendo al estilo machorro y varonil, y una acatando órdenes, pero…Lo que más me molestaba, era su manera tan mandona y determinante de dirigirse a mí, en una palabra, parecía mi padre y yo la niñita aplicada, sumisa y obediente, y esa etapa de la vida, ya la pasé, y por eso…Me casé antes y con tiempo, y porque me empreñó, y para tapar las apariencias y no dar pábulo a las habladurías, me veo en el altar vestidita de blanco, ¡madre mía qué gran error! Tres hijos tuve con éste hombre que me pegaba unas palizas que no sé cómo pude aguantar tanto…Padecí lo que no está en los escritos, a todo le ponía pega, se enfadaba por cualquier cosa, hasta que una mañana me apuntó con una pistola, y con toda tranquilidad se la quité de las manos, la tiré al suelo, hice las maletas, recogí a mis tres chiquillos y me marché de casa…¿De dónde saqué las fuerzas? No lo sé, pero…Como Ave Fénix renací de mis cenizas, hasta que lo conocí…Los dos primeros años fueron los mejores, pero a medida que pasaba el tiempo, empecé a conocerlo y cada vez me gustaba menos esa forma de hablarme tan dictatorial, y menos a éstas altura de mi vida, además le llevaba quince años y no estaba dispuesta a seguir tolerando sus palabras secas y tajantes, pero…No deseaba lastimar su ego, ya que era el típico tío al que nunca lo ha plantado una mujer, así que dejé que tomara la iniciativa de dejarme y tan campante, hasta que te conocí, y por eso…Te amé a la sombra del querer

No hay comentarios:

Publicar un comentario