martes, 10 de octubre de 2017

PERDIDA EN UN LABERINTO DE CRISTAL.- (MICRORRELATO)



Yo era sumisa, callada, recatada, apenas me quejaba, una niña modelo que jamás perdía la compostura, como decía mi santa madre…Estaba tan enamorada que aguantaba todos sus desplantes y desprecios con tal que no me dejara, y eran tantas las humillaciones y vejaciones por las que pasaba, que vivía completamente oprimida de como lo quería…Hoy me muestro ante ti Señor mío porque he cometido el peor de los errores de mi vida…arrastrarme a un hombre que nunca me ha querido...Gracias por hacérmelo ver aunque me duela el querer…Señor mío, hoy me postro ante ti con el corazón destrozado, roto a pedazos…pues…Mi vida es como un puzle de pasión donde sólo mandan los sentimientos que emanan de él sin orden ni control, latiendo a golpes de un amor juvenil que nunca maduró al ritmo de la edad…Éste órgano vital de mi existir, sólo se ha dedicado a llevar la sangre de un lugar a otro fluyendo por los órganos más tiernos y carnosos de mi cuerpo, regando mi cabeza de puras fantasías como si fuera todavía aquella niña que leía cuentos de hadas de príncipes y princesas, bellas doncellas y brujas malas y feas...y un sinfín de caballeros andantes que venían a rescatarme de dragones y mazmorras…He vivido dentro de una nube tanto tiempo que ni me acuerdo, pero ya sé que no quiero seguir metida en ella...Todo empezó el mismo día que lo conocí y a partir de entonces me dejé atrapar con engaños y falsas promesas de amor en las que ni él ni yo fuimos conscientes de tanta pasión…Le había entregado mi cuerpo, mis pasiones, mis pensamientos en la soledad de la noche, y mis lágrimas derramadas en la almohada, y aún sabiendo que no merecía mi llanto, lo esperaba con los brazos abiertos…pues…A éstas alturas de mi vida, ya no lo amaba, sino que lo adoraba sin remisión…A veces presentía que estaba liado con cualquier mujer que le sonreía y se tiraba varios días sin aparecer, pero lo necesitaba tanto que cuando venía daba saltos de alegría y me lo comía a besos…hasta que me harté de su mal querer…No comprendo por qué he soportado tanto tiempo a un hombre que sólo me ha utilizado como pañuelo para limpiar sus mocos. El caso es que cuando le decía que no aguantaba más y que me dejara tranquila, volvía sumiso y lloriqueando…Y por eso me encuentro desolada y triste, la cabeza llena de dudas que no paran de acecharme por todos lados, sin saber qué hacer…pues…El miedo controla mis emociones y me desestabiliza haciéndome caer siempre en la misma trampa del ayer…Las inseguridades atrapan mi mente, y un nudo de terror se centra en mi interior dándole vida a la trama que ella misma crea, escenificándolas de tal manera, que las vivo y las siento tan real y verdaderas, que la furia me ciega sin dejarme ver más allá que la existencia de su maraña…Señor mío, postrada ante ti me reafirmo y confieso que las dudas que albergaba en mi alma las mandé al infierno con todos los errores que cometí…Hoy quiero confesar que pequé contra todas normas de la sociedad por culpa de un mal querer…el suyo…y el mío…pues…No supe distinguir amor verdadero, de la ansiedad del puro deseo…ese veneno que corrompe y te arrastra a los infiernos…Señor mío, abre mis ojos, dame paz y cordura, calma mi corazón, mis brazos atenazados de horror, mis piernas destrozadas de dolor, hambrienta de venganza…Necesito que me ayudes y me digas que debo hacer. Reconozco que he perdido los nervios y he vuelto a caer de nuevo en mi propia trampa…No controlo mis emociones y mis palabras salen voraces, estrepitosas y lenguaraces, como si nunca hubiera recibido de mis padres una educación culta y respetable…A veces me debato contra mí misma, pero la furia y la rabia me domina y entorpece toda regla de civismo y me importa un bledo la gente que me rodea… ¡Oye tú! ¿Quién yo? Sí, sí tú…Ya no me atas ni te guardo la cara más, ¿te enteras? De ahora en adelante pienso salir con quien me dé la gana, y si me gusta un tío, me atrae y me seduce con sus palabras, me lo llevo a mi cama y después cada uno en su casa, y Dios en la de todas…Reconozco que me desboco y estallo como relámpagos y truenos hasta que la tormenta retumba en mi cabeza…eso es lo que me pierde a mí, y a ti el verme colérica e irritada te produce puro placer…y por eso…Jamás te volveré a llorar… pues…Yo sólo quería verte de frente, observar los gestos de tu cara, lanzarte la rabia que temblaba en mi boca para oír tus respuestas…leer en tus ojos la mentira escondida tras las pupilas de tu mirada, que yo conozco tan bien y la que siempre te delata de que no eres del todo sincero, y que por mucho que la empañas, mi corazón siempre me habla con sutileza y escenas que se pasean por mis canas…Esas hilaturas de canas blancas son las que ahora me adolecen el alma, la que me desarma y me hablan con calma…Ahora que ya eché todas mis lágrimas, las últimas que estoy derramando por tu amor, me despido de ti sin decirte adiós…pues…Esos hilos de seda blanco son los que me han hecho razonar, convenciéndome al fin de mi gran error al aferrarme a ti como una niña perdida en un laberinto de cristal…

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