Me enamore del olor de su piel, del sabor de sus besos y del
calor de su mirada, y por eso…Me dejé llevar por los sentimientos arrastrándolo
hacia mi pecho, y…Él que estaba deseando, se dejó manejar sin pensarlo...Pobre
de mí, que desde aquél dichoso día ya no sé vivir sin sus besos, ni sus
caricias…yo misma caí en la trampa que me puso su osadía atrayéndome con el
arpón de mi agonía…Es un amigo aspirante a amante que no para de insistir que
quiere un picoteo de mi, y yo que tengo un amante que no tiene aguante para
seguir viviendo sin mí, me dice que le gusto, que me quiere y que necesita
verme cada día por lo menos una vez, y...Como estoy loquita por él, me hago la
indiferente para que nunca pierda interés…pues…Vivo la mar de tranquila al loco
albedrío de la irresponsable dejadez...Es un sueño, una aventura, no lo sé muy
bien, lo único que quiero en ésta etapa de mi vida de dudas y aspavientos, es
sentirme libre de fuertes ataduras y vivir el momento cuando quiera, donde
surja y con usted, y por eso me estoy imaginando…Salir a su encuentro, colgarme
de su cuello y darle ese beso ardiente y con fuego para que sepa bien quién
soy…y de qué manera siento…pues…Si tanto desea saber a qué saben los besos de
ésta mujer, tendrá que arriesgarse a que sea yo la que tantee su boca con la
lengua felina que tiene ésta gata que tanto le gusta a usted, y luego no diga
que no lo avisé…que mucho presumir de macho cabrío, goloso y sobón de tangas
solitarias y abandonadas, pero...Con tal que da con una mujerona de armas tomar,
se pone en guardia preguntándose a todas horas... ¿Dónde estará esa señora que
podría ser mi mamá….? Es un crío, es un hombre, dígame caballero, ¿qué quieres
de mí? ¿Por qué me busca con tanta insistencia sabiendo que no estoy a la venta
de cualquier menda que me diga lo buena que está usted? Y a la chita callando,
me escribe entre sudores berreando, y con la mano masajeando lo que quisiera de
mi cuerpo tener a su lado, y yo que... Entreveo los vericuetos de esos mensajes
lascivos e inciertos, le contesto al momento directa y sin titubeos lo que
gritan las letras bien definidas y compuestas con frases ardientes y frescas,
y...Éste amigo que es un tunante con gracia y mucho arte, se lía en un
arbitrario mensaje felino maullando como un gatito...Y yo que escucho a lo
lejos el jadeo de su cuerpo, imagino que anda todo revuelto entre las sábanas
de su encierro…Y cuando acaba tan macabra carta, se queda solito y
despelotado…pues…Ese amigo, que sin saber que existía y por casualidades de la
vida se cruzó conmigo en la esquina del olvido, piensa que está entablando
conversaciones con una señora loca, necesitada y deseosa de sexo a todas horas,
y lo que ignora es que una tiene una historia llenita de aventuras locas entre
sedas, encajes y blondas rojas con ese hombre que es mi amante...mi eterno
amante al que amo con fuerza y hambre…pues…Ese amante es mi marido, padre de
mis hijos, me quiere y adora con la misma intensidad de la juventud añorada en
las horas malas, pero en las buenas, seguimos siendo jóvenes jilgueros
picoteando nuestros ajados cuerpos con la delicias de los besos lentos, las
caricias ciegas y el cariño del roce del tiempo...Y entre llamaradas de fuego
me dice abrazadito a mi cuerpo…Reina mía, todavía sigues siendo aquella
muchacha que conocí una mañana de abril…Y yo que soy romántica de por vida, con
alma poeta contando historias y aventuras locas, me las veo y las deseo para
quedar bien con mi amigo, mi amante y usted, pero…En este momento de mi vida sé
que en mi último aliento, sólo quiero que tus brazos rodeen mis hombros con mi
cabeza pegada a tu pecho y mis labios besando tu cuello…mis ojos mirando tu
rostro, me beses en el pelo y me digas junto a la oreja…Tú eres mi reina, tú
eres mi reina…
viernes, 13 de septiembre de 2019
lunes, 9 de septiembre de 2019
LOS BESOS DE LA FRUTA PROHIBIDA.- (MICRORRELATO)
Apenas tu nombre llega a mi garganta…me tiene que llamar el
querer…mil mariposas dejaron de latir…Sigo danzando sobre catacumbas inciertas
y moribundas fuera de aquí…Siento mi alma yacer debatiéndose en un duelo
inmundo como un vagabundo sin fronteras ni rumbo…Nada me ata a tu piel, sólo
quiero vivir sin ese pasado que encadena mi llanto con fuerza y desgarro chillando…No
persigas mis pasos que están dislocados con éste destino malvado y cretino y le
han dado por huir…No llores mi amor, no grites mi nombre sin voz…mira que tengo
los sentimientos enfrentados, están llenos de dudas y malos presagios que
escucho al viento…son como lágrimas derramadas diciéndome…Tenemos que hablar,
le dije…Se quedó tenso, cerró la boca contrayendo los labios y atravesándome la
mente con su mirada, me clavó dos puñales en el corazón…No podía soportar tanta
tristeza, tanta pena matando su alma…No tenía fuerzas para seguir hablando con él…Sentí
que se me quebraba el pecho en dos…apenas salía la voz de mi garganta y
haciendo un esfuerzo sobrehumano pude articular…Escúchame…Insistí sabiendo que
mis palabras serían en vano…Contuvo la respiración con los ojos en llamas
ardiendo…Escucha tu corazón…Empezó a bufar como un animal acorralado moviendo
la cabeza de un lado a otro…No quería oírme…Por favor, tenemos que dejarlo…Se
acercó a mí sujetándome los brazos con fuerza y empezó a zarandearme…Toda yo
parecía una marioneta en sus manos hasta que me deshice y le grité…Tienes familia,
también la tengo yo, somos dos almas errantes en busca de pasión, pero la
realidad es que estamos luchando a contra corriente, y ellos nunca nos dejarán
ser felices dentro de nuestra libertad…No, no, no…decía farfullando…No les haga
caso, pasa de ellos, sigamos así…te necesito, no puedo vivir sin ti, me haces
falta…me moriré, te juro que me quito la vida, me mato…No digas eso por favor,
no digas tonterías…Seguía en sus treces tapándose los oídos sin moverse de mi
lado…Escúchame bien…Mi hijo el mayor me ha dicho que si te vienes a vivir a
casa se va él, mi hija es la única que me comprende, pero la pequeña está triste,
le ha dado por no comer…no habla, en el colegio tiene un mal comportamiento y
todo se debe a que lo está pasando mal con la separación de mi marido…adora a
su padre, ¡compréndelo por favor…! Por tu parte, tus hijas no me pueden ni ver
y tu mujer se está haciendo la víctima poniendo a todo el mundo en contra mía,
por favor, tienes que entenderlo…¡No, no, no! ¡Escúchame tú a mí! Tus hijos y
los míos, tarde o temprano se independizarán y cuando seamos viejos nos dejarán
tirados y nosotros habremos perdido la oportunidad de ser felices…Lo sé, créeme
que lo sé, lo mismo que en un futuro me arrepentiré de haber tomado ésta decisión,
pero ahora tengo que hacer lo que me dice la razón, porque si le hago caso al
corazón lo dejo todo y me voy contigo, pero…Nunca sería feliz, siempre tendré una
espinita clavada en mi pecho…Nuestros hijos no han pedido nacer y no tenemos
derecho a hacerles sufrir…Seguía sin querer entrar a razones…Se tapaba los oídos,
hacía aspavientos con los brazos, se llevaba las manos a cada lado de la
cabeza, se daba la vuelta, se agachaba y se enderezaba…Me di por vencida y sin
decir nada me fui, y hasta ahora…No he vuelto a estar con él…Los días pasan sin
ningún remordimiento de conciencia…estoy tranquila y relajada sabiendo que esa
era la mejor opción…mi vida pasa con una calma serena y apaciguada…A veces miro
atrás y te recuerdo…recuerdo tus besos ardientes y apasionados…tus manos
acariciándome la cintura…los hombros, los cabellos…tu mirada…esa mirada fue la
que enamoró mi alma, ¿te enteras? Y por eso…Por la noche cuando me acuesto te veo
sentado frente a mí cruzado de brazos y mirando el suelo…y te siento…Siento
latir tu corazón en mi pecho…son los latidos del recuerdo…Siento tu llanto en
mis ojos…son lágrimas de tristeza y nostalgia…Siento tu voz en mi garganta…son las
voces del silencio…Siento tu boca en la mía…son los besos de la fruta prohibida,
y…Siento el vacío de tu alma entre las soledades de mis entrañas…
domingo, 8 de septiembre de 2019
QUIEN CON NIÑO SE ACUESTA, CAGADO AMANECE.- (MICRORRELATO)
Una morbosa curiosidad pendía sobre mi cabeza como si fuera
la espada de Damocles…No lo dudé un instante y resuelta me encamine hacia la
otra punta de la ciudad decidida a averiguar qué era lo que se traía ese tipo
conmigo…pues…No paraba de dejarme en el chat mensajes llenos de palabras
amistosas, pero entre líneas podía observar que me estaba tirando los tejos con
tal descaro, que me hizo sospechar lo peor…Bueno, tanto como lo peor no, pero
que estaba deseando cogerme por banda sí, y yo que estoy ya de vuelta de todos éstos
trápalas, me dejé seducir, o así se lo hice creer…Quizás esta coquetería mía, de
la cual me jacto y envanezco y de la que jamás renegaré, me hiciera ver más allá
de la realidad, e intrigada como estaba por averiguar las verdaderas
intenciones de éste simpático tipo que se movía en la red con el pirulí
pirulero, cosa que a leguas dejaba ver, seguí chateando de manera amable y natural,
aunque de vez en cuando le dejaba entrever que me encantaría conocerlo, a lo
cual me respondía rápidamente con mensajes algo subidos de tono, ¡menudo pájaro!
Pensaba para mí…Era un morboso de tomo y lomo que le atraían las mujeres de
edad madura, incluso se pavoneaba contándome sus aventuras presumiendo que lo
provocaban cuando iban al estudio, y él fogoso como era, caía rendido siempre…Lo
comentaba con tal desparpajo que parecía como si fuéramos amigos de la infancia…No
sabía qué pensar de él, haciéndome dudar de mi personalidad creyendo que estaba
anticuada, y que éste era el pensamiento actual…Una veces me hacía sentir ñoña
y desfasada y otras demasiado alocada para mi edad, por lo que decidí dejarme
llevar por la curiosidad…Esa curiosidad morbosa que nace en el interior, y por
eso…Me encuentro en medio de una calle llenita de cafeterías y tiendas, incluso
un pequeño parque donde unos cuantos ancianos charlan alegremente...Enfrente
una iglesia…Entré y me arrodillé... Señor mío, no sé
qué hago aquí...te ruego que me ayudes, lo único que quiero es que vea las
marcas de mi rostro, las señales del tiempo alrededor de mis ojos y en las
comisuras de mi boca, a ver si viéndolas se da cuenta de que podría ser su
madre y me deja en paz de una vez... pues...No para de insistir que le gustaría
conocerme, oír mi voz...¡Qué cosas más bonitas me dice por Dios...! Ayer
precisamente me mandó un audio para que lo oyera, al mismo tiempo quería que le
contestara porque imaginaba que tenía una voz suave y melosa, ¡madre mía de mi
vida! Al momento le contesté que era gritona, fuerte y segura…No sé porqué tuve
que darle tantas explicaciones, debe ser porque ya tenía en mente presentarme
ante él para sacarlo de dudas, y se diera cuenta de que no era tan bella y
preciosa como me veía en las fotos…No es lo mismo ver la imagen de una persona bajo
los rayos del sol, que a través de una foto colgada en la red donde la nitidez
no es tan clara y real…En cierto modo me daba pena herir sus sentimientos
cortando por lo sano…No sé porque me preocupa tanto…Quizás esta manía que tengo
de protección hacia los más débiles, y por eso…Me encuentro en un mar de dudas
rodeada de imágenes religiosas, como si ellas pudieran protegerme a mí... Salí
de la iglesia y seguí andando, cuando a la vuelta de la esquina lo veo caminar frente
a mí... Me dio dos besos y no paró de mirarme de arriba abajo con tal descaro
que temía reírme…parecía un niño grande…Tenía una sonrisa burlona en sus ojos
que les chispeaban como fogatas ardiendo… ¡Madre mía, éste es de los míos! Pensé
sin que se me notara demasiado…pues…Me encantaba ser objeto de seducción… ¡Vaya
cuerpazo que tienes…! Perdona que te lo diga pero estás buenísima…a ver, déjame
que te mire por atrás, ¡menudo culazo! Me estaba camelando de una manera
visceral que no sabía qué pensar si mentira o verdad, pero en el fondo de mi
corazón, me sentía como una diva…Me gustaba, era como si estuviera
aterciopelando los sentidos, y un regusto suave y dulzón regaba todos los órganos
de mi cuerpo…Enseguida me llevo a su estudio fotográfico y cerró con llave la
puerta...Era un espacio pequeño, en medio una mesa y en un panel de corcho
varias fotografías en blanco y negro pendía de chinchetas...Era como un puzle de
esos que aparecen en las películas antiguas…Aquí trabajo, es un estudio
sencillo y humilde como yo, y aunque no gano mucho dinero, sí lo suficiente para
vivir, dijo…Era canallesco y encantador…Me ofreció asiento, un sillín redondo
con ruedas, el cual nada más sentarme rodó hacia atrás y casi me caigo…Al
momento empezó a manipularlo rozándome el trasero…No paró de mirarme a los ojos
diciendo lo guapa que era...Me levanté alerta temiendo caer en sus redes…Me
enlazó por la cintura atrayéndome de tal manera que pude notar en mi vientre su
órgano vital... Me separé de sopetón…Sentí un respingón en el pecho que me subió
hasta la boca…No sé cómo me salió la voz de la garganta…pues... Era un pulpo
con tentáculos por todas partes...me besó el cuello, me acarició los hombros,
la espalda, los muslos y el culo... Me estaba sobando con todo el descaro del
mundo, y yo mientras tanto deshaciéndome de sus manos que rebusconas no paraban
de palparme como si fuera una pieza de fruta... Qué bien hueles... Qué piel más
suave...Qué buena estás...Tienes un cuerpazo...Qué boca, ¡por Dios! Tienes unos
labios tan carnosos que dan ganas de besártelos hasta hartarse…No me cansaría
de comerte la boca y todo el cuerpo, ven, arrímate más…No paraba de morderse los
labios haciendo muecas exageradas de pasión, sonriendo y haciendo amago de
echarme mano...¡Qué ricas estás! Quédate un rato, vamos a hacerlo... ¡Madre mía
de mi vida! Me estaba poniendo al límite…¡Me estaba sobando todo el cuerpo! Hacía
mucho tiempo que no me magreaban de esa manera tan calenturienta, y juro que sí
no salgo pitando de allí me lo hubiera zampado de un bocado, pero...Era tan
niño...muy alto, sí, pero era un chiquillo a mi lado, y...No quería volver a
repetir la misma historia, que por despecho tuve con un tipo veinte años más
joven que yo enrollándome de tal manera, que luego estuve más de un año pasando
las de Caín para quitármelo de encima, ya lo dice el refrán...Quién con niño se
acuesta, cagado amanece...
jueves, 5 de septiembre de 2019
ROCES ARDIENTES.- (MICRORRELATO)
Ángeles y demonios vienen tras mí gritando con fuerza que
esto es el fin…sin tregua aparente me persiguen sin cesar a dejarte sin más…pues…A
trancas y barrancas llevo una carga prendida en mis espaldas, que encorvada
camina por arenas movedizas sin un horizonte a la vista que diga que tu vida y
la mía siempre estarán unidas…A solas conmigo, muerdo mi lengua, cierro los
ojos y abro las piernas, y…Entre sueños veo dos cuerpos aullando en llamas
ardiendo…Despierto sudando con los cabellos mojados y revueltos, la boca
torcida y las manos perdidas en la hoguera maldita donde se dan cita las ansias
prohibidas...Sueños, tan sólo fue un sueño llenito de deseo…Sueño erótico,
salvaje y fantasmagórico…pura pornografía desollándome viva ante el hombre de
mi vida, que sin ser marido, amante ni amigo, es el dueño de mi sino…pues…Soñando
contigo me quedo en llama encendida de una sensualidad siempre viva, dejando en evidencia la resistencia
que acapara tus sentimientos y los míos, y por eso…Mi cuerpo que arde en deseo,
se tapa los oídos para no escuchar los gritos ausentes de la garganta yacente,
que aclama justicia para saber el porqué mi vida contigo se tiene que acabar…pues…Dispuesta
me chilla que no queda ni un hálito de amor para seguir con esta lucha donde
nunca se termina de batallar…Te quiero o no te quiero, ni lo sé ni me importa,
tan sólo necesito y deseo correr tras la libertad... Hay un duende que está
medio loco que no para de replicar...Me dice que ese hombre que no tiene nombre,
me acosa y me espía tras los muros de la fortaleza que lleva mi sangre fluyendo
por ríos que mueren en los mares…Herida y enferma, grito con los latidos de
seres malditos que no tienen voces en el pecho escrito, y yo que tengo los
tientos llorando sin lágrimas en las manos, derramo su llanto perdida en un
laberinto de amores infieles para que no sufran sus carnes vacías, y…Acaricio
la piel de hombres y mujeres con leves palabras de roces ardientes…pues...Tira
de mi carne, arrampla conmigo, me besa el ombligo, y…Sigue el camino con esa
lengua que atrapa la llave de la libertad
deshaciendo las ansias de volar, y…A la merced de su boca, me quedo desnuda y
sin prisas por ese beso que saborea la esencia de placeres ocultos…con fuertes
mareas de risas dantescas, prohibidas y jugosas por seguir manejando mi cuerpo
apasionado dispuesto a danzar, y…Cuando acaba tan rica salsa, lo dejo tumbado y
me pongo a cantar... Tú manejas mis venas sangrantes para anudarlas a tus manos
reptantes...
miércoles, 4 de septiembre de 2019
CON PREMEDITACIÓN Y ALEVOSÍA.- (MICRORRELATO)
Yo estaba casada con un buen hombre, mi vida era normal,
tranquila, pacífica…una pareja donde la jubilación está implantada en el hogar
como patrimonio nacional de acomodo y bienestar…No me faltaba nada, pero…Se había
convertido en una rutina constante, donde la pasión de los amantes dejó de ser bravo
para dar paso a la calma chicha de los navegantes…Más que marido y mujer parecíamos
hermanos, muy queridos…pero era cariño fraternal, y lo único que la hacía
interesante era cuando nos íbamos de viaje con el Imserso…Muchas veces me
asomaba a la ventana tirándome horas con la mirada perdida pensando, haciéndome
mil preguntas sin comprender a una señora que vivía con un hombre veinte años más
joven que ella, y eran tan felices, y por eso…Me dijo que no lo tomaba en serio
y desapareció de mi vida sin decir adiós, y yo que sabía el motivo, me quedé
tan tranquila…pues…Esto de estar todo el día preocupada de no herir la
sensibilidad de sus sentimientos, era como una losa en las espaldas que se me hacía
cada día más pesada su carga, sobre todo cuando recibía sus mensajes llenos de
frases ardientes y apasionadas…Ni siquiera tenía conciencia de cómo, ni cuándo,
ni de qué manera me sentí sometida a él, hasta que me di cuenta de que tenía
que hacer algo antes de que se me fuera de las manos…pues…No lo busqué, ni
siquiera le di pie a que pensara que todo el monte era orégano, y…Tampoco provoqué
tener una cita a ciegas con él, a la cual acudí con ansia y con sed…No sé que
pudo pasar por mi cabeza en aquellos momentos de mi vida...Debe ser por aquél
dicho que pulula por los aires y desde que tengo uso de razón he oído decir…La
cabra siempre tira al monte…¡Madre mía de mi vida! Pedazo frase, o refrán, o…Sepa
Dios si es una sentencia que no tiene dobleces ni parangón, el caso es que, de
repente me sentí como una cabra montesa de esas que brincan por montañas y barrancos
para despeñarse en brazos de su amado…Y me despeñé, ¡vaya que sí! Que me
desbaraté toda entera en su cuerpo y en su boca con una agonía desconocida para
mí hasta ese momento…Era como si me hubieran aducido…Yo no era yo, lo juro por
lo más sagrado, que me sentí ajena y extraña a mí misma…pues…Según caminaba
para esa cita, tenía la sensación de que el espectro de un alma errante se
había metido dentro de mi mente, exigiendo caricias ardientes para gozar de
los placeres de la carne, esos de los careció en su más bella juventud cuando vivía…Empecé
a correr sintiendo sus piernas veloces alentándome a seguir sin mirar atrás…Me
sentía exuberante, llena de entusiasmo y alegría, loca mi cabeza, haciéndome
mil ilusiones, deseando de llegar y entregarme a sus brazos…Estaba experimentando
las sensaciones más estrafalarias de mi vida, y un revuelo de mariposas cosquilleaban
por mi pecho haciéndome suspirar…apenas podía pararme a pensar con
razonamiento, sólo quería llegar…Los gemidos se escapaban de mi garganta con
frases ahogadas instándome a pecar…No me importaba cruzarme con personas
conocidas, tan sólo pensaba en mí y al pasar por un escaparate, vi reflejada en
mi rostro una sonrisa picarona y atrevida…era una auténtica desvergonzada…Me
había convertido en una de esas mujeres que se dan al primer tipo que las adula
con cuatro palabrejas halagüeñas, o dos carantoñas…¡Señor, Señor! ¡Qué ocurrencias…!
No, no, para nada, que una siempre ha guardado la compostura, como decía mi
santa madre que en paz descanse, y así me he tirado toda una vida aparentando
ser una señora de bien…Toda una dama…Dama damisela que se las daba de honesta y
recatada, hasta que me topé con un hombre que sacó de mí a la ramera que
escondida tenía en lo más profundo de mi ser, ¡vaya que sí! Porque siempre he
tenido parejas muy simples y ñoñas, bueno, no…Solamente que nunca tuve el
atrevimiento de decirles a mis chicos que no me hacían sentir esa alegría en el
cuerpo como para dar gritos desde la tierra hasta el cielo, y aún no sé porqué,
pero me daba una vergüenza que para qué voy a contar…Debe ser por la clase de
educación que recibí, y por eso… Me encuentro como una golfa corriendo por la
calle…pues…Tengo una cita con un muchacho que acabo de conocer, y…No sé por qué
algunos jóvenes, en vez de fijarse en una chica de su edad, se encaprichan de
una señora que puede ser su madre y las acosan y persiguen sin tregua hasta que
al final una pierde la razón y se lía la toalla en la cabeza y se sale por
peteneras…¡Ay si mi padre levantara la cabeza…! Era tan correcto y buen
cristiano…Todo empezó por una solicitud de amistad que gustosa acepté…Empezamos
a chatear tímidamente, hasta que me habló de sus carencias despertando las mías
con premeditación y alevosía…Al momento me dejé seducir por esa gracia varonil
que tanto me atrajo a mí, y por eso…Quisiera sentir en mi cuerpo a qué saben
sus caricias y sus besos…
Suscribirse a:
Entradas (Atom)