domingo, 10 de marzo de 2024

COMO CHISPAS DE FUEGO.- (MICRORRELATO)

 Dándole vueltas a la bechamel con la cuchara de palo, paso los momentos observando cada giro de la mano, los mismos que pasaba cuando de niña miraba el rostro de mi madre girando el mortero dentro del almirez, y yo, que en éste momento estoy preparando la masa para hacer croquetas a mis nietas…La mirada se me pierde entre ellas con los recuerdos que gritan tu nombre con las furias de los sentimientos, y al borde del abismo, sigo sin saber qué giro dar a mi vida, y…A medida que pasan los años, la nieve blanquea mis cabellos, los mismos que acariciabas con tus besos en la época estudiantil cuando las mariposas revoloteaban en mi pecho cada vez que me mirabas, y ahora…Mírame bien el rostro, verás las marcas de la edad alrededor de mis ojos, de mi boca y en la piel…Me aterra que ya no te guste lo que ves, me aterra mis senos, mi vientre y mis piernas lentas por el paso del tiempo en los huesos…Me aterra mis carnes flácidas e insensibles al tacto de tus caricias atrevidas y lisonjeras, y por eso…Es de locos seguir al ritmo de los años mozos como viejos aventureros, todavía enamorados de la vida, después de tantos apasionados encuentros que jamás quedarán en el olvido, pero…No puedo más mi amor, me rindo, estoy cansada de tanto pensarte, de esperar algo más que un simple asalto por sorpresa, sabiendo que jamás serás mío del todo, tan sólo un poquito de ti como si fueran las sobras de cualquier hombre, que como tú, está ávido de placeres desinhibidos, porque…Tú siempre ahí insistiendo, y por eso…No me sigas diciendo que me quieres, que no puedes olvidarme y que no paras de pensar en mí…Mira que si me lo dices tantas veces, me dolerán más los recuerdo y me confundirá la noción del tiempo como si me hubiera aparcado en el ayer, y ya no sabré ni quién soy yo, así que no me vuelvas a repetir, que…No puedes vivir sin mí, porque entonces perderé el rumbo de mi vida y moriré de dolor mientras sigo dando vueltas a la masa, que lentamente va espesando, como si estuviera marcando las pautas a seguir…La mirada se me nubla y temo que caiga una lágrima en la sartén, vaya a ser que las croquetas al comerlas mis nietas, les den por llorar de pena, en vez de reír por ricas y buenas, y no quisiera contagiarlas con mis letras…Apenas puedo seguir dando vueltas con el cucharón, que aferrado a mi mano, da un nuevo giro cuando una mañana de otoño te seduje con la coquetería de la inocente juventud, que…A pesar de los años transcurridos amándote, mi alma vuela hacia atrás y adelante sin saber cómo salir de este atolladero, donde las marcas de la edad están a punto de sucumbir al ritmo de la vejez anunciada, que poseída por un terremoto, se empeña en seguir los latidos del tiempo, apalancado como está en aquellos maravillosos años de la eterna juventud, y por eso…Ésta elegía a la vejez, que como un canto de amor, no existen alegatos hacia los sentimientos de cualquier edad, y…A Dios pongo por testigo que jamás podré arrancarte de mí…Siempre estás revoloteando alrededor de mis cabellos como si estuvieras ensamblado a ellos…pues…Fuimos presa de una fantasía, ésa fantasía que atrapa mis noches y mis días con la poesía escrita que llegan sin buscarlas…Aventuras que se adueñan de los sentimientos ajenos que arden por salir como chispas de fuego, y tú que lo sabes, las atraes para conseguir llevarme a tu terreno, y por eso…Aquella estudiante que conociste, siempre seguirá aferrada en mi interior como si estuviera poseída por los recuerdos del amor…Amor apasionado por las letras que brillan iluminándome la sonrisa al recordarte, mientras tanto...Sigo dando vueltas a la masa bechamel con éste cucharón, que entusiasmado, danza al ritmo del corazón

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