LOS ENCAJES DE MIS ENAGUAS DE SATÉN.- (MICRORRELATO)

 Paso a pasito me encuentro hilando los encajes de mis enaguas de satén, esa que rompiste con tu boca de fuego, la misma que una mañana otoñal saltó en llamas cuando con tu lengua belicosa, te perdiste por los recovecos de mi cuerpo con las furias de los deseos, y ahora, mientras aguja y dedal se afanan en repasar las hilaturas de tales enredos, me arden los sentimientos con su recuerdo…Debe ser que sigues palpitando en mi pecho, y por mucho que quiera echarte al olvido, el ayer se aferra a mi existencia diaria como si no hubieran pasado los años…¿No será que todavía estoy enamorada? ¿Enamorada tú? Sí, sí, como una adolescente…pues…Te siento en mis noches de ensueños, mis días de calma y mis tardes entre costuras, y por eso…Aquél guiño que me lanzaste cuando te cruzaste en mi camino, el estómago me dio un revolcón…¿No me digas? Te lo juro por mis ancestros, que me dio uno de esos revolcones que casi se me sale el corazón del pecho, era como si volviera a la adolescencia de antaño, habiéndose volcado los números del calendario en el tiempo y en los años, una adolescencia tardía entre las canas de mi pelo negro, y…En las carnes mías, que se contagian y deleitan con el recuerdo de tus caricias, esas que sucumbieron entre dos mares, y yo…Como ninfa enamorada, me enrosqué alrededor de tu cuello en un nudo marinero, y te arrastré hacia el fondo hasta que me arrancaste los gritos del mismísimo averno, y por eso…Cada tarde junto al costurero, se me llena el alma de alegría y sonriendo, poco a poco, voy recomponiendo éste encaje de blonda para que me lo arranques de nuevo con tu boca…pues…Con aquel guiño que me lanzaste cuando te cruzaste en mi camino, me dijiste cuánto me querías, y yo que sueño con tus besos belicosos, me ilusiono y te espero en reposo susurrando una plegaria al dios de mi credo…Señor mío, abre mis sentidos para buscar ese guiño y pueda oír lo que su boca calla, porque ésta duda me está matando en silencio cuando me voy a la cama, y no quisiera hacerme ilusiones para que luego no pase nada, y…Sigo esperando con las hilaturas de éste encaje interminable, y…Nada, no pasa nada, tan sólo las horas, los días y las semanas sin saber de ti, y yo que estoy viendo pasar el tiempo por mi alma y mi cuerpo, me estoy planteando salir de éste estado de melancolía, porque ya me está pesando tanta nostalgia, y…Estando batallando aguja y dedal, un leve pinchazo me hizo reaccionar…Hizo falta sólo unas gotas de sangre salpicando el encaje, para darme cuenta de que todo fue una aventura salvaje…pues…Fuimos como aves de paso en el ocaso de la vida, a las que utilizaron los avatares para volar tras las montañas, y por eso…Caí en sus manos, y ahora que me he dado cuenta que lo único que buscaban en mí era una parodia sin compromiso, ahora amigo mío, soy yo la que sanará sus heridas…pues…Me harté de tanto coser los encajes de mis enaguas de satén…