He conocido a un
hombre libre y bravo como las aguas del mar…Mi mar…Es tan persuasivo y eficaz a
la vez…tan sensible y agresiva su pasión que no pude más que rendirme a su
amor…Y por eso lo eché de mi lado, por temor a volver a dormir en la oscuridad
de mi cama donde las sombras me abrumaban… Te echo de menos mi amor, qué cosas me
pasan, debe ser que me acostumbraste mal…me mimaste demasiado con tus saludos
antes del amanecer, y ahora estoy perdida entre mis soledades, llorando mis
pensamientos tristes y apenados…Me cuesta tanto derramar lágrimas…sólo ha
pasado una semana y ya te extraño...Extraño tus peculiaridades, tus pequeñas
cosas, tus preguntas temerosas, esas que dejabas caer como temiendo adentrarte
en mis sentimientos, en mis pasiones ocultas…tenías tanto interés en inmiscuirte
en mis historias…Te presentía en cada palabra, y tú con las antenas puestas
para no herir mi sensibilidad…mirando de soslayo las respuestas, y yo ahí haciéndome
la inocente, como no queriendo darte importancia…No sabes cuánto me gustaba
llevarte a mi terreno…ni te imaginas…despertabas tantas e inquietantes emociones
en mí…me gustabas a morir…Tenía una curiosidad exarcebante por saber hasta
dónde serías capaz de llegar…Me encantaba ese juego de frases insinuantes,
siempre con doble intención…Lo que hubiera dado por ver la expresión de tus
ojos al leerlas, ¿qué pasaría por tu cabeza? Habría sido fantástico estar a tu
lado en esos momentos... me hubiera dejado hacer de todo, todito todo…por eso
no quería seguir adelante, ¿te enteras? Y ahora me siento triste y confundida...deseando
de volver a hablar contigo como la última vez…estaba asustada, ¿sabes? Tenía
miedo de volverme a enamorar de un imposible…Era como un tren de partida a ninguna parte…Me gustas, me decía…Tú también me gusta cielo, demasiado, deberíamos dejar de
seguir hablando… ¿Eso quieres? Sí, creo que sería lo mejor para los dos… ¿Te podrías enamorar? No quisiera ser
motivo de problemas, ¿y tú, te podrías enamorar? Podría pasar…Por eso,
no quiero complicarme la vida, ni a nadie, y menos a ti que pareces buena persona, se empieza
de broma y sin darse cuenta se forma una maraña… ¿A ti te
podría pasar? No quiero llegar a esos extremos, ¿por qué te empeñas que me
podría pasar a mí? ¿Y tú? ¿Dónde están tus sentimientos? Ya te dije que yo si podría,
te pregunto a ti, es una pregunta… ¿Por qué te interesa eso? ¿Qué más da? ¿Acaso sería menos complicado? Da igual…Sí, da igual…Lo importante es que se corte a tiempo las cosas
para no tener que lamentar nada, somos adultos y los dos sabemos
que esto, sea broma o no, no está bien…Ya…Yo empecé como un juego, una aventura sin importancia…Perdona,
a lo mejor me pase y me adentre demasiado…No, tú no te pasaste, no pienses eso, la que se pasó fui yo…Nos controlaremos… No cariño, no, yo no tengo control, soy incapaz de controlar mis emociones,
ellas me controlan a mí siempre, soy como un barco a la deriva y me gusto, no
quiero cambiar, tú me atraes por tu manera de ser y quizás pueda arrastrarte, o
dejarte llevar por la curiosidad o por morbo, por capricho o para pasar un
rato agradable, ¿Qué puedo decir que tú no sepas? Tú eres
el que tiene que perdonarme…No te preocupes…Pensé que me seguías el royo. Soy mucho mayor que tú, jamás pensé que pudiera atraer tu
atención, ¿me comprendes? Dime que me has comprendido por favor…No ha pasado nada, no
te preocupes, no pasa nada…Gracias mi amor, sólo era un juego, un cruce de
palabras…Adiós… Corro por las calles, buscándote… Me pierdo por los arrabales, por los
barrios más humildes de la ciudad donde tus brazos vacíos me esperan…Tengo el
pecho oprimido de tanto dolor cuando aquella mañana te dije adiós…Dime que no
es tarde para volver a tenerte otra vez…Dime que me piensas, que me quieres y
que aún no te has olvidado de mí…Yo era una niña inocente, pura, llena de vida.
Los días se me pasaban leyendo cuentos de hadas y después tuve una adolescencia
preciosa, y seguía leyendo…Desde que recuerde, he estado siempre metida entre
páginas, de tal manera, que los libros forman parte de mi vida, como la palabra
escrita, creando en mí una fantasía tan grande que hasta me creo mis propias historias
de amor…y las del prójimo…pues…Voy atrapándolas al tiempo como si fueran las
hojas de los árboles, que el viento arranca de sus ramas y se pierden
desperdigadas por ahí, esperando que las recoja al paso de los caminos…Como un
puzle de amor, las retrato con las palabras que me brotan del corazón… ¡Qué
bonita está la montaña con la lluvia derramada sobre ella…! ¡Qué bonito el
cielo encapotado…! Y allá a lo lejos,
las nubes flotando en el infinito como si fueran borreguitos blancos, se lían a
brincar entre algodones grises y pompas de jabón…Y yo mientras tanto voy
sorteando los obstáculo, aligerando el paso alrededor del monte donde una
ráfaga de aire me guían hacia él… ¡Oye tú! ¿Quién yo? Sí, sí tú… Tengo que hablar contigo largo y tendido…He descubierto lo bueno que
es eso de la distancia física… Tenía ansias por tu amor…Estaba asustada como cuando era una niñita en la oscuridad de mi cama, que veía sombras que abrumaban la soledad de mi alma…Todas las noches llenas de miedos e inseguridades…Ahí me di cuenta de que me equivocaba, que eran historias de cuentos de hadas, de príncipes encantados y brujas feas y malas…Y por eso hoy me encuentro volando en el cielo con las alas de su libertad…
es eso de la distancia física… Tenía ansias por tu amor…Estaba asustada como cuando era una niñita en la oscuridad de mi cama, que veía sombras que abrumaban la soledad de mi alma…Todas las noches llenas de miedos e inseguridades…Ahí me di cuenta de que me equivocaba, que eran historias de cuentos de hadas, de príncipes encantados y brujas feas y malas…Y por eso hoy me encuentro volando en el cielo con las alas de su libertad…
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