CON MIS ALAS AL VIENTO.- (MICRORRELATO)

 Con mis alas al viento tropecé contigo, enganchándome a tu cuerpo como presa a su cautivo, y estando entregada a tu abrazo como estaba, ya no pude despegar alas hasta que me arrancaste los besos del infierno en el que estaba viviendo, y fueron tan ardientes y apasionados, que me arrastraron a seguirte por todos lados, y tú que lo estabas deseando, envenenaste mi boca con tus labios sediciosos, que no había noche y día, que los suspiros de mi garganta me quemaran todo el cuerpo reclamándote a fuego lento, volviéndome toda loca por un beso más, llegando a la conclusión que ser esclava de ellos no puede ser bueno, prefiero echarte de menos que echarte de más, ya que es la única manera de arrancarte de mí, y por mucho dolor que me cause no volverte a ver, sé que el tiempo todo lo suaviza, y aunque me duela tu olvido al principio, sé que tarde o temprano, el dolor se apaciguará…Ya lo dicen las malas lenguas, que…No hay mal que cien años duren ni cuerpo que lo aguante…Es lo justo que quiero sentir en mi corazón, que a pesar que hay días que la nostalgia aturde mis ideas, cuando abro los ojos dejo de soñar y salgo airosa por esas calles que están llenas de pasiones ocultas, esas que en un lejano otoño, llenaron mi cuerpo de ti sabiéndote el hombre que más he amado en mi vida, y aunque…Todavía te lleve clavado en mis entrañas, sé positivamente que puedo vivir sin ti, algo que antes me era imposible imaginar…pues…Era tal la locura que sentía por ti, que no sabía si te quería o era adicción, y por eso…Aunque me duela reconocerlo, sé que siempre te llevaré grabado en mi piel, sobre todo ahora que tengo tanto frío amigo mío…Frío en el alma y frío tu olvido, frías mis palabras y frías las mañanas sin tus brazos atenazados a mis espaldas…Frío, tengo frío en mis noches sin tu abrigo, ese abrigo que acaricia los sueños de mis cuentos de hadas, y me duele pensar que me hayas dejado de amar como antes…Me duele ser tan egoísta, porque ni te quiero ni te dejo de querer, aunque…Sé que tuve toda la culpa por rechazar cada momento de pasión, y ahora, fíjate cómo me encuentro, toda triste y ojerosa de tanto como me acuerdo de ti, de tus sentimientos cuando me decías cuánto me querías y que te era imposible vivir sin mí, y por eso…Me duele el egoísmo éste que siento, que habiéndote echado de mi lado, te sigo reclamando como si fueras un personaje imaginario de quita y pon…Me pregunto qué es lo que está pasando por mi mente, el porqué de mis dudas…Debe ser éste temor a Dios que nos inculcaron la gente de mi generación…Me encuentro en un mar de dudas revolucionarias que arremeten contra mí con la angustia de un sin vivir constante y punzante, y por eso…Temo caer en un mundo de inmersión donde no pueda salir a flote, porque llevo muchos días encerrada y cautiva en una jaula sin candado de la cual no quisiera nunca escapar…La verdad es que, aunque me duelan los sentidos, tampoco me importa demasiado seguir contigo, ya que en el fondo de mi alma, no quiero amores prohibidos sabiendo que nunca serás mío del todo, así que sea lo que decida el destino…pues…Más vale dejarte al olvido que estar suspirando tras las rejas de mi alma, que…Como gata encelada te esperaba para calentarte entre sábanas, mientras me seducías con apasionadas palabras, y por eso…Llegó el momento de izar alas al vuelo…Seguí andando sin mirar atrás, ya que temía que estuviera esperando, y de un salto corriera a sus brazos, por lo que desistí a pesar del dolor que me causaba perderlo, cuando caí en la cuenta de que no se pierde lo que jamás se ha tenido, porque…Nunca fuiste del todo mío, tan sólo un sueño más que se enganchó con mis alas al viento…